Jalen Brunson, el omnipresente e incuestionable líder de los New York Knicks, el icono del renacimiento que está testimoniando la Gran Manzana, castigó el ‘empujón’ de perezoso de los Celtics. El base, con un tapón final a Malcolm Brogdon, evitó otra prórroga después de que hubiera forzado una Boston, que dejó todo para última hora en la segunda derrota seguida del mejor equipo de la NBA (117-120).
A veces el equipo de Joe Mazzulla transmite algo como cierta desidia, desconectado en el último cuarto de un igualado partido para permitir que el conjunto de Tom Thibodeau se viera saliendo del TD Garden con una sonrisa a mediados del último parcial (94-106). Pero como en la NBA de los récords anotadores cualquier desventaja es relativa, como estos Celtics tienen tanto poder, Boston lo arregló rápido con un ataque de MVP por parte de Jayson Tatum con 11 puntos en los últimos 5 minutos para prolongar otro partido (110-110) sin Marcus Smart por lesión.
La entidad de los rivales de las dos últimas derrotas -Heat y Knicks-, puede que aleje las sospechas de cierta desmotivación en el líder, delatado en todo caso por esos altibajos, por el llamativo 1-3 contra Orlando Magic. El brochazo final lo puso Brunson -29 puntos además con un 12/25 en tiros-, pero la mayor parte de la obra de los Knicks correspondió a Julius Randle, con 37 tantos (13/25 en lanzamientos y 5/13 en triples), imponiéndose tanto en el duelo individual como también colectivo al final a Jayson Tatum, con 35 puntos (12/26 en TC) y 14 rebotes. Por si fuera poco, le estampó un tapón de cuidado.
Jaylen Brown actuó como fiel colaborador de Tatum con 22 puntos, aunque no con una tan acertada serie de lanzamientos con un 8/22. Brunson, porque las estrellas son así, zanjó con su tapón el encuentro de la misma manera que lo hizo Robert Williams III con los 48 minutos reglamentarios para dar una vida extra a los Celtics. ‘Time Lord’ taponó el tiro de Jericho Sims para que luego el ex segundo de Luka Doncic hiciese lo propio con Brogdon para dar aún más valor al triple anterior de RJ Barrett y a la postre decisivo y reclamar más voz para los Knicks.
Y es que en el conjunto de ‘Thibs’, pese a que el Este también se va igualando cada vez más, encadena dos victorias de enjundia ante Cavaliers y los Celtics para situarse ahora séptimos con 26-23, cerca de unos Heat que ostentan la sexta y última plaza directa para play-offs. Bien cómodo, por su parte, sigue Boston en lo más alto, líder con 35-14 viendo lejos a sus perseguidores, Sixers (31-16) y Bucks (31-17). Siguen siendo los mejores. Aunque a veces parezca que se acomoden.