El Athletic volvió a ofrecer una mala versión el domingo fuera de casa. El equipo rojiblanco jugó una buena primera mitad, pero se vino abajo en la segunda, acorralado por el empuje del Atlético de Madrid. Julen Agirrezabala realizó dos buenas intervenciones ante el belga Jannick Carrasco, pero no pudo con Griezmann, uno de los verdugos históricos de los leones. El francés marcó el 1-0 con un disparo cruzado al segundo palo y los leones se vinieron de vacío a Bilbao, como ya ha ocurrido en otros desplazamientos con mal recuerdo como los realizados a Barcelona, Girona, el rival que visita San Mamés este próximo domingo, Donostia o Vigo.
Los números no engañan. El equipo bilbaíno solo ha sumado 12 puntos de 33 posibles como visitante después de tres victorias -Cádiz (0-4), Elche (1-4) y Valencia (1-2)-, otros tantos empates -Sevilla (1-1), Getafe (2-2) y Betis (0-0)- y cinco derrotas -Barça (4-0), Girona (2-1), Real Sociedad (3-1), Celta (1-0) y la del domingo en el Metropolitano-. El porcentaje solo llega al 36,3%, escaso para lograr el objetivo europeo puesto negro sobre blanco por directiva, cuerpo técnico y jugadores antes de comenzar la temporada. Estos datos contrastan con lo logrado en San Mamés, 20 en el mismo número de encuentros, un 60,6%, después de un balance de seis partidos ganados, dos empatados y tres perdidos.
El balance a domicilio en la jornada 22 de Liga
Todos los equipos que ocupan en estos momentos una plaza que daría derecho a jugar por el Viejo Continente la próxima temporada tienen mejores registros fuera de sus estadios: los cuatro de Champions -Barça (30 puntos), Real Madrid (27), Real Sociedad (25) y Atlético (23)-, el de Europa League -Betis (17)- y el de Conference -Rayo Vallecano (16)-. Incluso, un equipo que está por detrás, Espanyol, tiene números más positivos (14). Villarreal y Osasuna tienen la misma puntuación que los rojiblancos, aunque los amarillos han jugado un partido más fuera.
Estos registros contrastan con los sumados en casa, 20 puntos en 11 partidos (60,6%)
Curiosamente, los registros a domicilio están en la media lograda por Valverde en el banquillo rojiblanco. El técnico había sumado a estas alturas de la temporada 2003-24, su primera al frente del Athletic, once puntos en doce partidos desplazamientos y el balance fue de siete unidades en el curso siguiente para completar su primera etapa en Bilbao. El equipo acabó quinto en la primera y noveno en la segunda.
El gasteiztarra comenzó su segundo ciclo en el Botxo con 13 puntos en solo 10 salidas en la campaña 2013-14, cuando logró clasificar al equipo en cuarta posición para disputar la previa de la Champions ante el Nápoles de Rafa Benítez. Al año siguiente había sumado 11 en otros tantos partidos para acabar en el séptimo puesto, 14 en la 15-16 (5º) y 8 en la siguiente (7º), justo antes de marcharse al Barcelona