Brandon Ingram no había conseguido un triple-doble en siete temporadas como profesional, y en cuestión de una semana ha logrado dos. El de anoche sirvió para liderar con 31 puntos, 11 rebotes y 10 asistencias el claro triunfo a domicilio de los New Orleans Pelicans sobre los Denver Nuggets por 88-107. El gran ausente de la cita fue Nikola Jokic, que se quedó vestido de calle por culpa de unas molestias en el gemelo que arrastra desde la victoria del lunes por la noche contra los Philadelphia 76ers.
La ausencia del dos veces MVP de la NBA desordenó y desarmó a la franquicia de Colorado, demasiado acostumbrada a hilar su juego y su futuro a través de las talentosas manos de su estrella serbia. Fallaron sus nueve primeros tiros de campo y en la primera mitad solo anotaron 40 puntos con un 34,8% de acierto. No es coincidencia que esto ocurra cuando su máximo anotador, reboteador y asistente está de baja.
Willy Hernangómez volvió a disfrutar del triunfo de su equipo desde el banquillo y ni un solo minutos sobre la cancha. CJ McCollum, con 23 puntos, y Jonas Valanciunas, con 15 tantos y 12 rebotes, se encargaron de escolta a Ingram, líder de estos Pelicans ante la ausencia prolongada de Zion Williamson. El prodigioso interior lleva 40 partidos consecutivos de baja, pero pueden llegar noticias sobre su retorno pronto, ya que el próximo miércoles pasará nueva revisión médica.
Los Nuggets, no muy preocupados en la cumbre del Oeste, vieron como su liderato de conferencia se reducía a tres partidos de distancia respecto a los Memphis Grizzlies. Jamal Murray, con 21 puntos, 4 rebotes y 7 asistencias, junto a Bruce Brown en la segunda unidad, autor de 19 tantos, fueron los únicos que dieron la talla ante el complicado reto de ganar sin su Sol Jokic.
El triunfo, en cambio, resulta esencial para unos Pelicans que se sitúan ahora en séptima plaza y a la cabeza del play-in, con 39 victorias y 38 derrotas y a un solo partido de distancia de los Golden State Warriors (40-37), que cierran en sexta posición los billetes para acceder directamente a los playoffs.