Últimamente se habla mucho del “Título 42”. Viene con imágenes de multitudes de personas cruzando o en las orillas del Río Grande, que divide a los EEUU y México. Como se espera que termine el jueves, podría ser un buen momento para entender de qué se trata.
¿Qué es el Título 42?
El Título 42 es parte de la ley de los EEUU que se ocupa de la salud pública, el bienestar social y los derechos civiles. Otorga al gobierno federal la autoridad para tomar medidas de emergencia para mantener las enfermedades transmisibles fuera del país.
Antes de que el presidente Donald Trump lo usara en 2020, solo se había usado en 1929 para evitar que los barcos de China y Filipinas ingresaran a los puertos de EEUU durante un brote de meningitis.
Trump invocó la ley cuando estalló la pandemia del coronavirus, aparentemente para evitar la propagación del COVID-19, pero su implementación permitió a la administración de Trump expulsar a los migrantes más rápidamente sin tener que considerarlos para asilo y ha continuado bajo la administración de Biden.
¿Por qué se habla de ‘levantar’ el Título 42?
La administración de Biden había buscado repetidamente poner fin a la política, pero sus planes se retrasaron debido a los desafíos legales de fiscales generales de los estados republicanos. La pandemia disminuyó, lo que hizo que la orden de salud pública que condujo al uso del Título 42 quedara expuesta y la Corte Suprema de los Estados Unidos canceló los argumentos en el caso. Otro esfuerzo de la administración para deshacer la política había sido bloqueado por un juez federal en Louisiana.
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¿Por qué ha sido controvertido el uso del Título 42?
Los grupos humanitarios y de inmigración acusaron a la administración Trump de utilizar la pandemia como pretexto para negar a decenas de miles de personas que emigran a los EEUU la oportunidad de recibir ayuda humanitaria a través del asilo.
También han criticado a la administración de Biden por seguir usándolo. De hecho, grupos proinmigrantes han dicho que la medida aviva el racismo y permite la discriminación porque algunos países, como Venezuela, estaban exentos.
La administración de Biden comenzó a aplicar el Título 42 a los venezolanos en octubre y comenzó a permitir que 30,000 venezolanos al mes ingresen al país a través del permiso humanitario, lo que resultó en una disminución en la cantidad de venezolanos que cruzan la frontera.
En enero, México acordó recibir más migrantes expulsados de los EEUU. lo que también ayudó a administrar la cantidad de personas que llegan a la frontera. Pero en marzo hubo un repunte con la anticipación del fin del uso del Título 42 y con la llegada de temperaturas más cálidas por la primavera, según la Oficina de Washington para Asuntos Latinoamericanos.
Los acontecimientos mundiales, las disparidades económicas, las operaciones de contrabando en expansión de los cárteles, la inacción del Congreso y las leyes de inmigración obsoletas han significado que la cantidad de veces que los agentes fronterizos se encuentran con personas que cruzan ilegalmente al país ha regresado a las cifras registradas a principios de la década de 2000.
Entonces, ¿la frontera estará abierta o no será segura si termina el Título 42?
Definir la frontera como “abierta” o no segura tiene más que ver con la retórica política.
Si termina el Título 42, el gobierno vuelve a la ley de inmigración anterior, que se enmarca en el Título 8 del Código de estatutos federales de EEUU.
Si bien los oficiales fronterizos pueden expulsar a las personas del país más rápidamente según el Título 42, porque pueden prescindir del proceso de asilo, a los migrantes no se les imponen las penas que ahora enfrentarían según el Título 8: entre ellas, hasta dos años de prisión si una persona ingresa al país ilegalmente después de haber sido expulsado o deportado.
Sin esas consecuencias, los migrantes mexicanos y otros han estado usando el Título 42 “como un medio para obtener múltiples oportunidades para ingresar a los Estados Unidos”, dijo Ariel Ruiz Soto, analista de políticas del Instituto de Políticas Migratorias. “Eso es contraproducente, porque de alguna manera incentiva a los migrantes a intentarlo varias veces, y cuantas más veces lo intenten, más probable es que tengan éxito”.
La administración ha estado exigiendo a las personas que desean solicitar asilo sin cruzar la frontera ilegalmente que hagan citas a través de la aplicación CBP One, pero la aplicación ha sido frustrante para algunos cuando fallan después de varios intentos de obtener citas, que los han dejado en situaciones a menudo peligrosas y en condiciones de hacinamiento en México. La frustración puede llevarlos a intentar entrar ilegalmente y luego pedir asilo.
En 2019, antes de que entrara en vigor el Título 42, solo el 7% de los migrantes detenidos por la Patrulla Fronteriza habían sido detenidos anteriormente. La tasa de reincidencia creció a 27% en el año fiscal 2022.
Según el libertario Instituto Cato, el Título 42 se ha utilizado principalmente para expulsar a los adultos solteros de México y el Triángulo Norte. El año pasado, casi la mitad de esos adultos solteros habían sido arrestados previamente bajo el Título 42, informó Cato.
Además, el instituto descubrió que la cantidad de personas que fueron detectadas cruzando ilegalmente pero no arrestadas, conocidas como “fugas”, aumentó bajo el Título 42 de 12,500 por mes en 2019 a un promedio de 50,000 el año pasado.
No utilizarán fuerza ni realizarán arrestos.
¿Por qué las ciudades en la frontera y en el interior están nerviosas por lo que viene después?
Incluso con el Título 42 en vigencia, los grupos sin fines de lucro que administran refugios en los EEUU, así como los funcionarios en las ciudades fronterizas, han tenido que responder a grandes grupos de personas después de que Aduanas y Protección Fronteriza los liberaron.
Brindarles a los migrantes alojamiento, comida, ropa y asistencia para viajar a sus destinos finales, a menudo fuera del estado donde tienen familiares o amigos, requiere dinero, voluntarios y espacio.
Algunos funcionarios esperan que haya un aumento en el número de personas que lleguen a la frontera cuando finalice el Título 42, incluidas aquellas que lleguen legalmente a los puertos de entrada para solicitar asilo.
Además, existe la preocupación de que el aumento en la cantidad de personas y el tiempo de procesamiento adicional podrían obstruir el movimiento regular en los puertos de entrada.
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