Willy Hernangómez (28 años, 2,11) ha finalizado su séptima temporada en la NBA, repartida entre de New York Knicks, Charlotte Hornets y New York Pelicans, equipo este último con el que ha promediado 12,1 minutos en cancha en la temporada regular (6,9 puntos y 4,7 rebotes), una presencia en cancha un tanto reducida si se tiene en cuentas que el pívot madrileño venía de un pasado verano exitoso con la selección española, con medalla de oro en el Eurobasket y trofeo de mejor jugador (MVP) del torneo. Los Pelicans tienen que decidir antes del 29 de junio si ejecutan la opción unilateral que tienen de renovarle por una temporada más, en la que percibiría 2,5 millones de dólares. Su futuro, por lo tanto, no está claro. En esta entrevista, realizada en Barcelona con motivo de la promoción de la bebida energética, Reign, se explica.
¿Qué van a hacer los Pelicans con usted? ¿Le han dicho ya si van a ejecutar la opción que tienen para que siga?
No, no sé lo que va a pasar. Lo que sí sé es que les di mi opinión. Les dije que estoy muy bien en New Orleans, llevo tres años allí, nunca había estado en un equipo más de tres años. Me gustaría continuar, porque me gusta el proyecto, el entrenador, los compañeros… Pero yo quiero jugar, me quiero sentir importante y quiero aportar y luchar por títulos. Si ellos no me ven con ese rol, buscaré otra alternativa. Yo no tengo el control, ellos tienen la opción de ejercer la ampliación de contrato.
¿Y qué le han dicho a usted los Pelicans?
Ellos me han dicho que les gustaría que yo siguiese. Pelicans y yo tenemos una relación buenísima. Yo creo que he ayudado mucho en el vestuario a crear un buen ambiente y ellos nunca me han puesto ninguna traba. Veremos también qué pasa en el ‘draft’, porque tenemos una elección del ‘draft’ en el número 14 y puede haber muchos cambios. En un mes te lo digo.
¿Ha pedido el traspaso?
Lo pedí en febrero. Veía que no me daban oportunidades y que no me las iban a dar, pero al final ellos decidieron que me quedase en New Orleans. Me dijeron que iba a tener oportunidades, cosa que al final no ha ocurrido.
¿Qué interés hay en usted de otras franquicias? Supongo que la reglamentación NBA impide tener negociaciones…
Sí, no pueden negociar o hablar, pero, bueno, yo llevo muchos años en la NBA y cuando juegas contra otros equipos siempre hay compañeros, entrenadores… Vas a cenar y hablas con ellos y te dicen que no entienden tu situación, que vente con nosotros… Son comentarios que utilizo como motivación para seguir trabajando.
O sea, es un interés, digamos, extraoficial…
Sí, son cosas más de amistad, personales, de confianza…
¿Su prioridad es la NBA?
Sí.
¿Hay opción de regresar a Europa?
Mi prioridad es seguir en la NBA. Es mi sueño. Yo cada día me levanto por la mañana contento por estar en la NBA. Voy a por mi octavo año y sigo teniendo la ilusión de demostrar que puedo jugar y puedo ganar. Pero tampoco cierro las puertas a nada. Sí que es verdad que en mi proyecto de carrera deportiva me gustaría ganar una Euroliga, porque no tengo ninguna. No sé decirte en tres, cuatro, cinco años…
Pero usted la próxima temporada se ve en la NBA…
Sí. Obviamente siempre escuchas proyectos que te puedan ofrecer, porque al final lo que quieres es un proyecto deportivo que sea atractivo y donde te sientas querido y que sea un proyecto ganador. Pero mi idea es seguir en la NBA.
Se lo pregunto porque hay rumores de su vuelta al Real Madrid, recientemente se le vio viendo un partido del Madrid…
Bueno, fui a ese partido porque tengo tantos amigos allí que me gusta ir a verles, pero ayer también quería ir a ver al Joventut y la próxima semana me gustaría ir al Palau a ver un partido del Barça. Me gusta el baloncesto. Obviamente, yo soy de Madrid, pero en un proyecto deportivo no me cierro las puertas a nada.
¿Fichar por el Barça sería una línea roja que no traspasaría, siendo usted de Madrid y con su pasado en el club ‘blanco’?
Si es un proyecto atractivo, en el sentido de poder jugar, de ganar títulos, de dominar Europa…. No me cierro las puertas a nada, ya te digo. Obviamente, me encantaría volver al Real Madrid, es mi casa, pero si no hay un proyecto y no cuentan conmigo…
El otro día leíamos a Ricky Rubio que ya vislumbra un regreso a Europa en un año o dos. ¿Usted le pone años a su vuelta o aún no?
No, de momento no, no sabría decirte en un año o en dos…
Hablemos del Mundial con la selección española. ¿Disponible totalmente?
Sí, totalmente y con la máxima ilusión. Vamos a intentar llegar a lo más alto. Es una de mis cosas favoritas, estar con la selección, entrenar con Sergio (Scariolo), con este grupo de jugadores.
No sé si se afronta con más ganas al venir de una temporada NBA con menos protagonismo del deseado…
Siempre he afrontado la selección con las mismas ganas. No me tomo la selección como una reivindicación, sino con la ilusión de clasificarnos para los próximos Juegos Olímpicos e intentar ganar una medalla. No vamos a pensar que hemos sido campeones del Eurobasket, porque sería meternos presión, pero sí que vamos a competir contra quien sea, vamos a luchar a por todas.
Bueno, eso es lo que pasó en el Eurobasket, que había muchas selecciones con grandes estrellas y España llegó muy unida con jugadores batalladores como Alberto Díaz, por ejemplo. Había algo en ese grupo de jugadores que otros no tenían.
Sí, sí, el ADN. Es el gen de competir, que te dé igual quién está delante, si es Estados Unidos u otro. Es dar el máximo en cada partido. Y Alberto Díaz es un ejemplo. Él se deja la piel, igual no tiene el talento de otros, pero se deja la piel. ¡Es que no hay jugadores como él! Teníamos un grupo con tan buena ‘química’ que todos remábamos en la misma dirección. Esa va a ser nuestra mentalidad y eso es lo que les tenemos que transmitir a los jugadores que vienen de la ‘cantera’, chicos como Aday (Mara), Izan Almansa o Juan Núñez, son talentazos que estoy deseando que lleguen a la selección.