Este será un verano muy largo para Ja Morant. La NBA acaba de anunciar que le suspende 25 partidos por su conducta perjudicial para la competición. Su segundo desliz con pistolas en las redes sociales después de haber escarmentado tras la primera polémica y la consecuente tímida sanción han provocado la reacción con mano dura de la liga, que llevaba tiempo esperando el momento adecuado para anunciar su resolución.
Según han adelantado la ESPN y The Athletic, la sanción al base de los Memphis Grizzlies, de 23 años, le mantendrá alejado de cualquier actividad de su franquicia y la liga hasta finales de año. Además, después de cumplir los 25 encuentros sin jugar, deberá cumplir una serie de requisitos para reintegrarse a la competición.
“Para Ja, el baloncesto debe pasar a un segundo plano”
Adam Silver, comisionado de la NBA, ha compartido el razonamiento detrás de la suspensión a través de un comunicado compartido por la liga en las redes sociales:
“La decisión de Ja Morant de volver a exhibir un arma de fuego en las redes sociales es alarmante y desconcertante, dado su comportamiento similar en marzo, por el cual ya fue suspendido durante ocho partidos”, explicó el ejecutivo. “La posibilidad de que otros jóvenes imiten la conducta de Ja es particularmente preocupante. Bajo estas circunstancias, consideramos que una suspensión de 25 partidos es apropiada y deja claro que no se tolerará el comportamiento imprudente e irresponsable con las armas“, prosigue el dirigente.
“Para Ja, el baloncesto debe pasar a un segundo plano en este momento. Antes de su regreso a las pistas, se le exigirá cumplir un programa con la liga que aborde directamente las circunstancias que lo llevaron a repetir este comportamiento destructivo”, aclara Silver en su comunicado.
Dos ‘deslices’ con armas en dos meses y otras polémicas
El origen de la polémica con Ja Morant se remonta al pasado 4 de marzo. El base mostró una pistola durante una retransmisión en directo en Instagram emitida desde un club de alterne de Denver, justo después de haber disputado un partido contra los Nuggets. En el mismo documento podía verse al jugador ebrio. Por esa primera aparición, la liga le suspendió con ocho partidos después de un suave escarmiento que levantó críticas en el entorno de la competición.
El 13 de mayo, poco más de dos meses después de haberse declarado arrepentido y haber pasado una semana y pocos días en un centro de rehabilitación en Florida, el jugador volvió a tropezar con la misma piedra. En esta ocasión, se le pudo ver con un arma dentro de un coche mientras abandonaba un encuentro con varios amigos en el área de Memphis.
Más allá de sus dos sesiones de exhibicionismo con pistolas, Morant ha sido noticia por otros escándalos destapados por The Washington Post en los últimos meses. Según el rotativo, el jugador recibió un trato policial muy favorable en varios de estos incidentes relacionados con él y su grupo de amigos y familiares. Entre los casos conocidos está la agresión a un adolescente de 17 años después de una pachanga callejera algo caldeada y las amenazas e intimidaciones a un vendedor de zapatillas en un centro comercial de la ciudad. También ha trascendido un incidente en un partido de voleibol de instituto de su hermana, que se enfadó con otra estudiante y recibió el apoyo subido de tono de sus familiares.
Ja Morant: “Me doy cuenta de cuánto daño he causado”
Después de conocerse su sanción de 25 partido, Ja Morant compartió un comunicado con los principales medios estadounidenses, reiterando una vez más sus disculpas y su período de pausada reflexión. “He tenido tiempo para reflexionar y darme cuenta de cuánto daño he causado. Quiero pedir perdón a la NBA, a los Grizzlies, a mis compañeros y a la ciudad de Memphis”, arranca el jugador de 23 años.
A los niños que me ven como modelo a seguir, lo siento por haberos fallado
“A Adam Silver, Zach Kleiman y Robert Pera, que me han apoyado y dado la oportunidad de convertirme en atleta profesional, lo siento por el daño causado. A los niños que me ven como modelo a seguir, lo siento por haberos fallado. Prometo que seré mejor. A mis patrocinadores, seré un mejor embajador para nuestras marcas. A todos mis seguidores, voy a compensaros esto, lo prometo”, añade.
Durante este largo verano para él, Morant asegura que seguirá trabajando en su salud mental y en su capacidad de toma de decisiones. También, evidentemente, piensa seguir trabajando en el plano físico y sobre la pista para poder estar preparando ante un hipotético retorno a la NBA.
Aunque todavía no hay detalles precisos sobre qué requisitos deberá cumplir más allá de un programa de rehabilitación propuesto por la liga, el jugador deberá convencer a todos los implicados que esta vez ha escarmentado y ha entendido el porqué de su dura suspensión sin paga de cara al inicio de la próxima temporada regular. Si lo hace, podremos ver a Morant sobre las pistas a finales de diciembre o principios de enero, una vez cumplidos los 25 partidos de suspensión.