Como en modo resaca todavía de la locura del fin de semana pasado con el inicio de la agencia libre, los despachos de la NBA llevan en silencio demasiados días. Pero un tenso silencio, a punto de estallar una bomba cuya cuenta atrás podría estar ya en marcha.
La bomba, en las manos de los Portland Trail Blazers y Damian Lillard, quien ya prendió la mecha hace una semana con su petición de traspaso en lo que va a ser un movimiento con mucho de sentimental por la inminente ruptura entre ‘Dame’ y su franquicia de toda la vida, que no le va a poner fácil la separación.
La estrella de casi 33 años sólo ve como destino los Heat y nada más que los Heat pese a la larga lista de pretendientes de la que se ha hablado: Celtics, Clippers, Jazz, Nets… Y tal es su pasión por Miami que, tal como apunta Adrian Wojnarowksi, el agente del base, Aaron Godwin, ha estado llamando a todo aquel que no sea el conjunto de Florida para advertirles que ni lo intenten: estarían consiguiendo a un jugador “infeliz”. Quizá lo habría sido si el interés de los Warriors en ‘Dame’ antes de contratar a Chris Paul en una información de Ramona Shelburne se hubiera concretado.
Tyler Herro es el punto de conflicto de la operación
Sin embargo, los Blazers -que suficiente tienen ya con perder a su estandarte-, tienen muy claro que, si hay trato con los Heat, va a ser uno que les beneficie también lo máximo como franquicia. Como pasa con lo de intentar ganar el anillo -principal motivo del divorcio-, la franquicia no tiene la misma prisa que Lillard, en este caso para buscarle destino. Tan poca, que, si en septiembre no ha habido una oferta convincente, no se descarta que ‘Dame’ empiece el ‘training camp’ en septiembre con Portland.
Al frente de la operación está el General Manager de Portland, Joe Cronin, ayudado por el catalán Sergi Oliva, asistente de General Manager de la organización de Wisconsin.
A Tatum le gustaría jugar con Lillard
Los Blazers buscan un paquete con activos de draft y jugadores jóvenes interesantes en el contexto de la reconstrucción del equipo alrededor de Scoot Henderson, número 3 del draft. El hecho de que no se decidiera traspasarle en busca de una estrella de primer nivel para acompañar a Damian Lillard, los Blazers dejaron claro que su sentido de la urgencia para luchar por el anillo no es el mismo que el del All-Star pese a que aseguren públicamente que quiere confeccionar un equipo ganador con ‘Dame’ como piedra angular.
Según Wojnarowski, lo máximo que pueden ofrecer los Heat teniendo en cuenta lo que quiere Portland son dos ‘picks’ de draft de primera ronda de 2028 y 2030, cinco años de intercambios de selección de primera ronda, Nikola Jovic –27 de la lotería de 2022-, y Jaime Jázquez, elegido en el 18 del último draft aunque tras haber firmado su contrato de ‘rookie’ no puede ser traspasado hasta el 31 de julio.
Uno de los grandes puntos de conflicto es Tyler Herro. Por simple lógica salarial, los Heat necesitan quitarse de encima los 27 millones que va a costar el escolta la próxima temporada para hacer lugar para los 45 de Lillard. A sus 23 años, Herro encaja en el perfil de jugador joven que quieren los Blazers, quienes, sin embargo, no están interesado en el Sexto Hombre de la temporada 21-22, pues ven al escolta como un cromo repetido teniendo ya a Anfernee Simons y Shaedon Sharpe.
Butler, próximo compañero de Lillard
Así las cosas, parece inevitable que entre por lo menos un tercer equipo en la operación que quiera quedarse a Herro y se ha hablado en ese sentido de Spurs. El cómo llevar a cabo el traspaso es ahora mismo lo que tiene congelado el movimiento con Miami también teniendo muy claro que quiere juntar a Lillard con Jimmy Butler y Bam Adebayo para sumar ese plus de calidad que le faltó en las Finales contra los Nuggets.
Los Boston Celtics, que volverán a estar en la primera línea por el anillo, podrían ser también un atractivo destino para ‘Dame’, con la necesidad los de Joe Mazzulla de agregar un base de categoría después del traspaso de Marcus Smart a los Grizzlies.
A pesar de todo, Damian Lillard sólo puede acabar en Miami y en los próximos días el proceso se puede acelerar pues, según ha asegurado Marc Spears, ambas franquicias se van a reunir en los dos próximos días en Las Vegas, quién sabe si la cumbre definitiva para, por fin, hacer feliz a Lillard.