Con el paso del tiempo, es completamente normal que las juntas de los azulejos del baño terminen volviéndose negras. Y es que, es muy fácil que estas ranuras tan pequeñas acumulen suciedad, la cual es nada sencilla de eliminar cuando fregamos el suelo. Más allá de ser un problema estético, el hecho de que las juntas estén negras puede ser un riesgo para la salud si proliferan bacterias y moho.
El mejor truco casero para limpiar las juntas del baño
Por suerte, existe una solución muy sencilla para limpiar las juntas del baño y que queden totalmente blancas. Puedes hacerlo con amoniaco, pero este es un producto muy tóxico, así que si tienes problemas respiratorios o hay niños o mascotas en casa, es mejor que busques otra alternativa.
El bicarbonato de sodio puede ser tu gran aliado, un producto ampliamente utilizado en la limpieza del hogar porque tiene múltiples aplicaciones. Necesitarás: bicarbonato de sodio, jabón de platos, vinagre, guantes y un cepillo.
- En primer lugar, despeja todo el suelo del baño, retirando cualquier objeto que pueda interferir la limpieza.
- Barre el suelo y luego friega con agua templada para eliminar la suciedad superficial.
- El siguiente paso consiste en preparar la mezcla a base una cucharada de jabón de platos, una cucharada de bicarbonato de sodio y una cucharada de vinagre.
- Aplica la mezcla por los juntas y frota enérgicamente con el cepillo.
- Por último, una vez estén las juntas limpias, pasa una fregona con agua tibia y luego deja que se seque el suelo.
Usos del bicarbonato de sodio
Además de para limpiar las junta del baño, el bicarbonato de sodio sirve para otras muchas cosas.
A la hora de lavar la ropa, es una muy buena alternativa al detergente. Por cada tres kilos de ropa debes utilizar una cucharada de este producto. Está especialmente recomendado a la hora de lavar ropa blanca, ya que tiene efecto blanqueante.
También es muy útil para lavar frutas y verduras. Al momento de consumirlas, solo tienes que preparar una pasta con agua y bicarbonato de sodio y frotar con ella la superficie de las frutas y verduras para retirar toda la suciedad. Acláralas con abundante agua tibia.
Uno de los usos más populares es como limpiador de objetos y joyas de plata. Del mismo modo que para lavar frutas y verduras, prepara una pasta con bicarbonato de sodio y agua. Luego, con un paño, frota los objetos o joyas que quieras limpiar. Aclara y seca con otro paño.
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