En plena crisis de Ferrari por el aplastante dominio de Mercedes en las seis primeras carreras del año, en Maranello
necesitaban una alegría como la de este sábado, en el que Sebastian Vettel salió del hoyo en el que parecía estar hundido durante todo el inicio de curso para hacerse con la pole en el GP de Canadá de F1. Pole importantísima no solo para el equipo italiano, sino para un germano que desde el inicio del curso ha recibido una enorme presión por parte de la prensa italiana y de todo el mundo. Pocos creían ya en su liderazgo. Pedían que el brazalete de capitán pasara ya al joven Leclerc. Pero Sebastian, que hace unos días ya acabó con los rumores que hablaban de una posible retirada al final del presente curso asegurando no pensaba en ella y que todavía tenía “algo que hacer en Ferrari”, este sábado respondió de forma todavía más fuerte sobre la pista, superando a Hamilton por 0”206 cuando el inglés prácticamente ya estaba celebrando su segunda pole consecutiva. Sebastian sumaba 17 carreras sin probar el dulce sabor de la pole, concretamente, desde el GP de Alemania de 2018 que tan malos recuerdos le trae. Este domingo, el tetracampeón del mundo buscará su primer triunfo del año, el primero para Ferrari.
Vettel despertó al mismo tiempo que lo hacía Ferrari, y es que si en algún lugar el conjunto rojo debía dar un golpe sobre la mesa era en Canadá, donde su velocidad punta les da una enorme ventaja en el las largas rectas de Montreal. Y no solo eso, el calor de la pista canadiense acaba con los problemas que han sufrido durante todo el inicio de año para calentar los neumáticos para ser competitivos. Y por una vez, tras unos años llenos de errores, Ferrari la clavó, una gran manera de olvidar al menos por un día el grave fallo que cometieron hace dos semanas en Mónaco con un Leclerc que esta vez arrancará en tercera posición.
‘Bocadillo’ de coches rojos pues para un Hamilton que se quedará sin la ayuda de su escudero en el inicio de la carrera de este domingo, puesto que un sorprendente Ricciardo conquistó su mejor clasificación en su primer año con Renault finalizando cuarto por delante de Gasly y un Bottas que esta vez no estuvo a la altura, por primera ocasión este curso.
Sainz, noveno
McLaren corroboró sus buenas sensaciones en el GP de Canadá metiendo sus dos coches en Q3. En un trazado en el que el coche inglés va bien debido a que es parecido a Bakú y Bahrein, donde el MCL34 ya fue competitivo, Norris arrancará octavo por delante de Carlos Sainz, que saldrá noveno. Buen punto de partida para que el español vuelva a buscar los puntos por cuarta carrera consecutiva. No obstante, los coches ingleses no pudieron liderar la zona media, honor que esta vez fue para Renault, con Ricciardo en la cuarta plaza y Hülkenberg en la séptima.
Verstappen, fuera de la Q3
Uno de los principales rivales que Carlos tendrá tras suyo será Max Verstappen, que teóricamente no debería sufrir para pasar al McLaren del español. El holandés se vio perjudicado por el accidente que Magnussen tuvo al final de la Q2 en el ‘Muro de los Campeones’ y que le impidió realizar su última vuelta lanzada. El neerlandés no pudo pasar a la Q3 y arrancará desde la undécima posición por detrás de Kevin.
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