Del pozo al gozo en sólo tres días


Del pozo al gozo, del infierno al cielo. Hace solo tres días que la Rojita parecía condenada al fracaso y ahora está ‘volando’ rumbo a Tokio. El pasado miércoles, en el minuto 89 del partido contra Bélgica, la selección Sub-21 estaba haciendo las maletas, pero para regresar a España tras su derrota en el primer partido ante la anfitriona Italia y no pasar del empate frente a los belgas. Pero entonces apareció Pablo Fornals. Su gol ‘in extremis’ ante los ‘diablos rojos’ cambió radicalmente el hasta ese momento desolador panorama. El malagueño, nuevo jugador del West Ham, reabrió entonces la puerta de la esperanza que hoy se acabó de abrir de par en par. En Bolonia hubo ‘manita’ y España ya está entre las mejores cuatro selecciones de Europa y, lo más importante, volverá a disfrutar de unos Juegos Olímpicos después de la decepción que supuso no estar en Río 2016.

El incontestable triunfo ante Polonia no lo fue solo por el 5-0 final; también por el fútbol desplegado. Hasta Gerard Piqué se quitó el sombrero por la exhibición del conjunto de Luis de la Fuente. “¡Felicidades a la selección sub 21 por la clasificación para los Juegos Olímpicos! ¡Qué partidazo! ¡El siguiente paso es ganar el Europeo!”, escribió en las redes sociales el jugador barcelonista. No era para menos. La Sub-21 había dado un recital de fútbol ofensivo.

Sin la referencia de un punta nato, con Oyarzabal (su lesión fue la única nota negativa) de ‘falso nueve’, la selección construyó desde atrás, moviendo el balón con celeridad, buscando las bandas, con constante movilidad de los jugadores… Todo ello dirigido por Dani Ceballos y Fabián Ruiz, representantes de la mejor escuela andaluza de fútbol y que fueron dos de los grandes triunfadores en el Estadio Renato Dall’Ara. No era la Plaza de toros de la Real Maestranza de Sevilla, pero salieron a hombros al igual que el resto de sus compañeros de cuadrilla. Olé España, olé.


Source link