El mundo va a fijar sus ojos esta tarde en una selección española que empieza a despertar algo más que curiosidad. Las de Jorge Vilda se han ganado el máximo respeto en este Mundial, ya no son ni mucho menos la ‘Cenicienta’ que se coló en Canadá 2015 sino un conjunto que destaca por su estilo de juego de toque y posesión, por su consistencia defensiva, por su garra y competitividad sobre el césped y en definitiva por poseer armas muy poderosas para hacer frente a cualquier rival.
Hoy afrontan en el estadio Auguste-Delaune de Reims (18h/Gol TV) el partido de sus vidas ante la nº1 del mundo y favorita al título, nada menos que Estados Unidos, con la consigna de mostrar al mundo por qué hay que creer en ellas. Se van a dejar la piel en busca de los cuartos de final y van a competir con descaro y sin complejos, dos argumentos más que convincentes para poder soñar.
“Se van a dejar la vida“ aseguraba el seleccionador antes del choque. “Es obvio que las favoritas son ellas pero con nuestra actitud seguro que podemos plantarles cara y el nivel competitivo es algo que va a ser determinante”.
Vilda daba las claves: “Si solo vemos a un equipo y no a grandes estrellas, tendremos mucho ganado. Somos un grupo muy competitivo, que se crece ante los grandes rivales y eso es lo que haremos”.
Marta Torrejón celebraba el privilegio de poder enfrentarse a un combinado de tanta envergadura en el terreno de juego y fuera de él, dada la repercusión de sus jugadoras en la sociedad: “Son un ejemplo en todos los sentidos, por su impacto y porque muchas niñas tienen en ellas a sus referentes. Son un ejemplo a seguir”, señalaba y celebraba que “la gente pondrá el punto de mira en nosotras, y es bueno que se fijen porque lo daremos todo en el campo”.
Mentalidad ganadora
Saber gestionar los nervios y el brutal estrés de enfrentarse a las mejores jugadoras del mundo va a ser vital. El factor mental se ha trabajado a conciencia, tal como explicaba Irene Paredes: “Hemos de ser las primeras en creernos que se puede ganar. Estamos preparadas, creemos en nuestras armas, en nuestras posibilidades”.
Vilda insistió en que mantendrán su habitual estilo de juego de tener el balón a pesar de que enfrente habrá un bloque muy rápido, muy peligroso en el juego vertical y sobre todo de gran envergadura física.
Está todo estudiado para hacer frente al vendaval americano, que ya ha sumado 18 goles en este Mundial y acumula 47 partidos seguidos marcando y siete sin recibir un gol. “Las estadísticas están para romperse. Nosotros garantizamos que nos vamos a dejar la vida”, sentenciaba Vilda
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