Marcelo desveló en una carta en The Players Tribune que sufrió un ataque de ansiedad antes de la final de Champions de Kiev ante el Liverpool.”No podía respirar. Intenté no entrar en pánico. Fue en el vestuario justo antes de la final de Champions contra el Liverpool en 2018”, cuenta el lateral blanco sobre esa ansiedad que sintió ya la noche anterior: “No podía comer, no podía dormir”.
“Cuando tienes la oportunidad de hacer historia, sientes esa carga. Pero por alguna razón, la estaba sintiendo de verdad. Nunca antes había sentido una ansiedad tan intensa, así que no sabía qué estaba pasando. Pensé en llamar al médico, pero me preocupaba que no me dejara jugar”, rememora el defensa.
Marcelo trató de autocontrolarse y aseguró que en esos momentos pensó en “¿cuántos niños en el mundo juegan a la pelota? ¿Cuántos de ellos sueñan con jugar en una final de la Champions League?”. El lateral trató de controlar su respiración, deseoso de saltar al campo por allí, según él, todos los males desaparecen. “Cuando finalmente pisé el césped, todavía tenía problemas para respirar, y pensé: si tengo que morir aquí esta noche, joder. Moriré”.
Marcelo desveló que recuperó la calma tras el calentamiento. “Nos alineamos para el saque inicial, bajo todas las luces, vi el balón de fútbol en el círculo central, y todo cambió. El peso se fue quitado de mi pecho. Estaba en paz” dijo.
El lateral del Real Madrid desveló en esa carta que “unos días después de esa final, un ex jugador del Real Madrid había dicho algo sobre mí en la televisión que estaba en mi cabeza. Cuando se le preguntó qué pensaba sobre esa decisión, respondió: “Creo que Marcelo debería comprar un póster de Mohamed Salah, ponerlo en la pared y rezar todas las noches. Después de 12 años y 3 Champions, me faltó el respeto de esta manera, en vivo, en la televisión. Este comentario fue hecho para derribarme. Pero me motivó mucho”.
Marcelo acabó diciendo que “quería la tercera Champions consecutiva para el Real Madrid. Quería que los chicos de Brasil me miraran como yo miraba a Roberto Carlos. Quería que se dejaran crecer el pelo por Marcelo, ¿sabes?”.
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