Koke cerró la victoria del Atlético
de
Madrid contra el Espanyol con el 3-1. Un gol que supuso su primer tanto de la temporada. Es cierto que el centrocampista vallecano nunca se ha caracterizado por su idilio con el gol pero siempre ayuda al equipo con algunas ‘dianas’ al final de la temporada.
Un tanto que llegó en el tiempo de descuento, unos minutos después de que el Espanyol tuviese algunas opciones de lograr el empate. Gran jugada de Diego
Costa que se interna por la derecha, la pone atrás y cuando todo el mundo pensaba que iba a rematar con todo de cara Héctor
Herrera, la deja pasar para que el balón le llegue al capitán y ponga el 3-1 definitivo. Un auténtico golazo por la gran jugada colectiva.
Ocho años y ocho meses han pasado desde que Koke anotase su primer tanto oficial con el primer equipo del Atlético
de
Madrid. Llegó el 26 de febrero de 2011 contra el Sevilla en el estadio Vicente
Calderón, y encima fue de cabeza. Desde entonces su campaña más anotadora ha sido la 2013-14 en la que marcó siete tantos, seis en Liga y uno en Champions
League contra el Barcelona. Un tanto que sirvió para pasar a semifinales. La campaña pasada estuvo a punto de batir su récord con seis tantos.
Su último tanto llegó el 12 de mayo de 2019 contra el Sevilla. Un partido que los colchoneros empataron a uno en el Wanda
Metropolitano. Ahora vuelve a abrir su casillero de goles, veremos si es capaz de batir el registro de los siete goles de 2014.
Un tanto que le ha valido para ganar mucha confianza y de paso para volver a meterse al público del Metropolitano en el bolsillo. Un público que llegó a pitarle en un partido. Tras su gol la grada llegó a corear su nombre. Aquellos pitos parece que han quedado en una mera anécdota.
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