Uno de los objetivos de Sergio
Fernández cuando desembarcó en el Alavés en el verano de 2016 en sustitución del anterior director deportivo, Javier
Zubillaga, fue dotar al equipo de un patrimonio deportivo, de un núcleo de futbolistas sobre el que sustentar la plantilla en temporadas sucesivas. Sin en las dos primeras campañas de la actual etapa en Primera la revolución en el plantel fue absoluta, en las dos últimas el club ha optado por una sensata apuesta por la continuidad.
Esta elección se traduce en varios datos. El primero, la pérdida progresiva de los cedidos en el once titular. A diferencia de anteriores cursos, en el actual tan sólo Aleix Vidal es el único futbolista llegado a préstamo que integra el núcleo duro de la plantilla, el grupo de doce elegidos que cuenta con la absoluta confianza de Asier
Garitano.
El resto de cedidos, con mayor o menor fortuna, pelea por ganar protagonismo en el equipo
El resto de cedidos, con mayor o menor fortuna, pelea por ganar protagonismo en el equipo. Son los casos de Magallán y Oliver
Burke, que buscan su sitio en un plantel con el menor número de cedido de las últimas campañas.
Indiscutible
Sólo uno, Aleix
Vidal, pero con un papel muy relevante en el equipo. Sin sitio en el Sevilla, este verano eligió la opción del Alavés para volver a sentirse futbolista y recuperar su mejor nivel después de que, en febrero de 2017, una grave lesión de tobillo, sufrida precisamente en
Mendizorrotza, cortase su brillante trayectoria cuando todavía militaba
en
el
F.C.
Barcelona.
Este verano, Sergio
Fernández
apostó por él como extremo diestro titular del equipo, la posición que más le gusta. Aunque todavía está lejos de ofrecer el nivel que se espera de él, su rendimiento va mejorando. Es líder en asistencias del equipo con dos, junto a Lucas
Pérez, y cada día se compenetra mejor con Martín
Aguirregabiria. Sin duda, la banda diestra albiazul gana con ambos presencia en el juego en cada jornada.
Asier
Garitano está teniendo mucha paciencia con él, convencido de que puede aportar mucho al equipo. Es junto al punta gallego el único que ha participado en todos los encuentros, siendo titular
en
once de ellos y, con 967 minutos disputados, es el tercer jugador más utilizado, sólo por detrás de
Rubén
Duarte, con 1.
080
minutos, y Joselu, con 978.
Los delanteros, en propiedad
Los derechos del resto de los doce elegidos pertenecen al Deportivo
Alavés, incluidos los de Lucas
Pérez y Joselu, la dupla ofensiva albiazul. Por primera vez en las ultimas cuatro campañas, el once titular no cuenta con atacantes a préstamo. Dado que los jugadores de ataque son siempre más caros, en los anteriores ejercicios siempre se buscó la opción de las cesiones para acceder a jugadores de calidad.
El número de cedidos en el once titular ha ido bajando con el paso de las campañas
Ahí están los casos de Deyverson, máximo goleador babazorro con siete dianas en la Liga 16-17, Munir, pichichi con diez en la 17-18, Guidetti, Calleri, líder con 9
goles
en la pasada, o Borja
Bastón, entre otros.
En este curso, los líderes ofensivos babazorro pertenecen al club. Se trata de Lucas
Pérez, con siete
dianas, y Joselu, con cuatro. Ambos cuentan con contratos largos, hasta junio de 2022. Visto su rendimiento en este primer cuarto de Liga, la elección parece acertada.
El número de cedidos en el once titular ha ido bajando con el paso de las campañas. Cuatro fueron en la campaña 16-17 –Marcos
Llorente, Theo
Hernández, Camarasa y Deyverson-, también cuatro en la 17-18 –Pina, Guidetti, Munir y Pedraza-, tres en la pasada –Calleri, Bastón e Inui en la segunda vuelta- y sólo uno en la actual –Aleix
Vidal-.
Los derechos de algunos de los futbolistas que llegaron cedidos han sido adquiridos por el club en propiedad. Destacan los casos de Rubén
Sobrino, ahora en el Valencia, Rodrigo
Ely, Tomás
Pina o John
Guidetti. Salvo en el caso del sueco, cuyo nivel descendió de manera alarmante en el pasado curso, el Alavés ha sabido comprar bueno, bonito y barato.
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