Jean Todt es una de las pocas personas que puede entrar en la mansión de Michael Schumacher, convertida en fortín y a su vez en clínica medicalizada para los cuidados del 7 veces campeón del mundo de F1 desde que el 29 de diciembre de 2013, hace casi 7 años, sufriera un fuerte accidente de esquí en la estación de Meribel que le cambió la vida. El actual presidente de la FIA, uno de los grandes amigos de Schumacher por su pasado conjunto lleno de éxitos en Ferrari, reveló hace unas semanas en la radio francesa ‘RTL’ que visita varias veces al mes al alemán. En aquella entrevista, dijo que el heptacampeón está siguiendo la evolución de su hijo Mick, que el pasado domingo se proclamó campeón de la Fórmula 2 y que el próximo año dará el salto a la F1 con Haas, equipo con el que este viernes debutó en la F1 al participar en los primeros entrenamientos libres del GP de Abu Dhabi. Todt ya aseguró en otras entrevistas que veía algunas carreras de F1 junto a Michael, pero siempre, en todas sus declaraciones, ha argumentado que no revelará nada sobre el estado de salud de su amigo por respeto a la familia. En esta ocasión, en una entrevista al diario ‘Ouest France’, dejó alguna pista más sobre el ‘Kaiser’, aunque destacando la discreción que quería mantener sobre este tema.
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“Soy muy discreto sobre este tema, ya que sabemos que Michael Schumacher tuvo un accidente muy grave el 29 de diciembre de 2013, y que lamentablemente tuvo graves consecuencias. Desde entonces, está siendo tratado para poder volver a una vida más normal. Su hijo, Mick, se coronó campeón de Fórmula 2 el domingo después de una dura última carrera. Y está anunciado que competirá en F1 con el equipo Haas en 2021”, comentó. En este caso, la novedad de sus palabras está en admitir que los cuidados que está recibiendo el teutón tienen el objetivo de que el piloto pueda realizar “una vida más normal”, aunque sin dar detalles.
Confía en el potencial de Mick Schumacher
Además, también se refirió al ascenso de Mick Schumacher a la F1, mostrándose feliz por los logros del hijo de su gran amigo.
“¡Estoy encantado! Porque es una familia que amo. Es un niño que vi nacer, le tengo un cariño especial, le apasionan las carreras y la conducción. Mientras las cosas le vayan bien, estoy feliz por él”, expresó al respecto.
“¿Si le veo potencial para ser campeón? Campeón, ya lo es, de Fórmula 3 (Europea) en 2018, y en Fórmula 2 este año. La siguiente etapa, que probablemente será la más importante y la más difícil, es la Fórmula 1. Ha demostrado que tiene cualidades para sacarle el máximo partido a un coche. Después, si tiene el coche que tenían Romain Grosjean y Kevin Magnussen, tendrá resultados comparables a ellos. Si tiene el tipo de coches que tienen Lewis Hamilton y Valtteri Bottas, sus resultados obviamente serán diferentes. Lo que podemos esperar, para él y para la Fórmula 1, es que habrá más coches que se acerquen en prestaciones al Mercedes”, comentó, esperanzado de que Mick, tras su adaptación a Haas en los próximos años, pueda disponer de un coche competitivo en el futuro en una F1 que persigue lograr una mayor igualdad entre los monoplazas a partir de 2022.
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