A Rodrygo Goes se le empiezan a acabar las oportunidades justo cuando el Madrid entra en el tramo decisivo de la temporada. El extremo brasileño, uno de los futbolistas llamados a ser importantes en el futuro a medio y largo plazo del club blanco, sigue atascado con un solo gol en cuenta anotadora y no ve puerta desde hace seis meses. Su única diana del curso llegó el pasado 3 de noviembre ante el Inter de Milán y desde entonces han pasado 172 días. A finales de 2020, eso sí, sufrió una importante lesión muscular que le tuvo apartado de los terrenos de juego dos meses.
El ex del Santos, de 20 años, todavía sigue con el contador a 0 en la Liga a pesar de las oportunidades que le ha ido brindando Zinedine
Zidane desde su recuperación, hace ya casi tres meses. El entrenador francés apostó por Rodrygo en los partidos ante Getafe y Cádiz para dar algo de aire a Asensio y Benzema, muy exigidos tras el maratón de partidos contra Liverpool y Barcelona.
El brasileño encadenó dos encuentros titular por segunda vez este curso, algo que no sucedía desde antes lesión, cuando arrancó en el once consecutivamente ante Shakhtar, Alavés, Sevilla y Borussia
Monchengladbach. Contra el Getafe, en un Madrid plagado de suplentes por culpa de las lesiones, Rodrygo empezó el choque ocupando la posición de interior, una demarcación inédita para él desde la llegada al Madrid. El brasileño apenas pudo entrar en juego (solo dio 23 pases en 65 minutos) y se le vio muy desubicado en todo momento.
En Cádiz mejoró notablemente sus prestaciones coincidiendo con Benzema en el terreno de juego. El brasileño volvió a ocupar posiciones más interiores alejadas del área y se le vio más enchufado y con mucho más protagonismo.
A la espera del duelo de semifinales de Champions contra el Chelsea, Rodrygo podría volver a ser de la partido mañana contra el Betis en el Di Stéfano. Sería una de las últimas oportunidades que le quedan para dar un paso al frente y reclamar galones justo cuando reaparece Hazard, que si las lesiones le respetan es indiscutible para Zinedine Zidane.
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