Abanca podría sumar una nueva integración a su perímetro de consolidación en breve. Se ha convertido en la opción favorita para quedarse con la filial española de Novo Banco, cuyo proceso de venta lleva abierto varios meses, aunque es ahora cuando parece que llega a la recta final.
Su actual dueño, Lone Star, lleva tiempo intentando desprenderse de su participación, pero todo indica, según fuentes cercanas al proceso de venta, que la operación de adjudicación está cerca, y gana puntos el grupo que preside Juan Carlos Escotet, ávido de crecer con compras.
Hasta hace unas semanas el principal candidato era el grupo chino Haitong Bank. Y es que pese a tener ya presencia en Europa, su origen no termina de convencer a los supervisores. En 2017 intentó, de hecho, comprar Tressis en España, pero la operación se frustró.
Con sede también en Lisboa, Haitong ya conoce Novo Banco, ya que en 2015 adquirió parte de su negocio vinculado al mercado de capitales.
Abanca, por su parte, cuenta ya en su haber varias integraciones desde que en 2014 Escotet entró en el mercado español con la compra en subasta de Novacaixagalicia, origen de Abanca. Hace unas semanas cerró la compra de Bankoa, y unos meses antes ya había adquirido Deutsche Bank Portugal y Caixa Geral de Depósitos en España. Intentó la compra de Liberbank, pero fracasó. La venta de Novo Banco en España se está llevando a cabo por activos o negocios, ante el desinterés inicial por la compra de otra filial.
Así, Andbank, que también lleva varias compras a lo largo del pasado año, es otra de las firmas candidatas para quedarse con activos de este banco luso, pero solo puja por una parte del negocio, como es la banca digital y la banca privada. También puja por Novo Banco Eurocaja Rural.
Según la información distribuida por Deutsche Bank, banco de inversión contratado por la firma lusa, Novo Banco España contaba con 1.600 millones en créditos y 1.900 millones en depósitos, concedidos a 24.700 clientes a través de una red de 10 oficinas con 180 empleados. Precisamente, de los clientes, 640 son de banca privada –con activos por más de un millón– y 5.900 de banca personal –entre 150.000 euros y 1.000.000–. El resto son pymes, en gran parte.
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