Roman Abramovich ha completado hoy definitivamente la venta del Chelsea por la cifra récord de 5.000 millones de euros a un grupo de inversión liderado por el magnate estadounidense Todd Boehly y el fondo Clearlake Capital poniendo así a un proceso de tres meses que se inició el 2 de febrero con el anuncio del oligarca ruso de su decisión de desprenderse del club tras la invasión de Ucrania.
El consorcio, que ganó la licitación para adquirir el Chelsea a ide mayo, recibió la aprobación de la Premier League y el gobierno británico la semana pasada para que la venta siguiera adelante. El sábado se llegó al acuerdo final.
“Al vender el club, el Sr. Abramovich estipuló que el nuevo propietario debe ser un buen administrador del club, las ganancias netas de la venta deben donarse a caridad y que no buscaría el reembolso de los préstamos hechos a los afiliados del club. club”, informa el Chelsea en su comunicado.
La venta también ha necesitado la luz verde del gobierno de Portugal después de que Abramovich se convirtiera en ciudadano del país luso el año pasado.
A un día del fin de la licencia
El Chelsea ha estado operando bajo una licencia especial que expiraba el 31 de mayo tras ser emitida por el gobierno británico al quedar congelados los activos de Abramovich en aplicación de las sanciones dictadas contra el oligarca por sus vínculos con Vladimir Putin.
El Chelsea revela que ha recibido más de 250 consultas de posibles compradores y ha llegado a 32 acuerdos de confidencialidad con las partes interesadas.
El club finalmente recibió 12 ofertas creíbles que se redujeron a cuatro antes de que el consorcio liderado por Boehly fuera elegido como el candidato preferido.
Fin a una etapa de éxitos de 19 años
Abramovich compró el club en 2003 por unos 160 millones de euros y su inversión dio paso a la era más exitosa de su historia, con cinco títulos de la Premier League, cinco FA Cups y dos Champions League, entre los títulos más importamte. Ahora el magnate ruso vende el Chelsea por 4.000 millones de euros.
El Chelsea precisa que Boehly y Clearlake compartirán el control y el gobierno del club a partes iguales aunque el magnate, que es copropietario de Los Angeles Dodgers de béisbol, ejercerá de presidente de la compañía.
2.000 millones de inversión en áreas clave
“Boehly y Clearlake se comprometen a invertir en áreas clave que elevarán la competitividad del Chelsea, incluido el desarrollo de Stamford Bridge, una mayor inversión en la academia, el equipo femenino y el estadio Kingsmeadow”, subraya la nota.
Los nuevos dueños han prometido que 2.000 de los 5.000 millones de euros de la operación de compra irán dirigidos a esas inversiones.
Además de Boehly y Clearlake participan en el consorcio el millonario estadounidense Mark Walter, también copropietario de los Dodgers, y el magnate suizo Hansjörg Wyss.
Involucrados al 100%
“Nos sentimos honrados de convertirnos en los nuevos custodios del Chelsea Football Club. Estamos todos involucrados, al 100%, en cada minuto de cada partido”, dijo Boehly.
“Nuestra visión como propietarios es clara: queremos enorgullecer a los aficionados. Junto con nuestro compromiso de desarrollar el equipo juvenil y adquirir el mejor talento, nuestro plan de acción es invertir en el club a largo plazo y construir una notable historia de éxito”, prosigue Boehly en el comunicado.
“Quiero agradecer personalmente a los ministros y funcionarios del gobierno británico y de la Premier League por todo su trabajo para hacerlo posible”-
La finalización del proceso de venta permite ahora al Chelsea reanudar su actividad en el mercado de fichajes, comprar, vender y renovar jugadores, reabrir la tienda del club y vender entradas para todos los partidos. Una actividad que estaba congelada debido a las sanciones impuestas a Abramovich.