“Espero que el capítulo 15 de mi libro sea la conquista de la segunda Champions”, sentenciaba la jugadora del Barça Aitana Bonmatí, durante la presentación en el ImaginCafé de Barcelona de su libro ‘Totes unides fem força’ (Todas unidas hacemos fuerza), escrito por Cristian Martín y donde relata sus vivencias y anécdotas. La genial centrocampista de 24 años aseguraba que “poder volver a jugar una final de la Champions y esta vez con público sería muy especial, pero aún no es momento de pensar en ello. Aún no me quiero imaginar esa situación porque primero hay que ganar al Wolfsburg”.
Está claro que Aitana tiene la espina clava de haber conquistado la primera Champions de la historia del Barça femenino sin el calor presente de su afición a causa de la pandemia, un tema pendiente que aspira a solventar esta temporada con la final de Turín. Para ello, habrá que eliminar antes al equipo alemán en las semifinales que arrancan este viernes día 22, de nuevo en el Camp Nou, que espera batir otro récord: “Será una eliminatoria muy igualada ante el Wolfsburg”, avisa la azulgrana, que aún tiene vivo el recuerdo de la amarga derrota en semifinales de 2020.
Arropada por su familia, con su madre Rosa Bonmatí en primera fila -la responsable de que la futbolista lleve el apellido materno en primer lugar- y más de un centenar de seguidores, la jugadora explicó sus inicios en el fútbol, en un momento en que todavía no estaba normalizado. “Los niños no me dejaban ser capitana, supongo que por el orgullo masculino”, recuerda la catalana. “Tampoco tenía referentes femeninos”, destaca, aunque ahora “espero ser un referente para las niñas y también para los niños”.
Después vino la llamada del Barça y los entrenamientos nocturnos. Aitana cogía todos los días el transporte público, primero el autobús y después el tren, para poder ejercitarse en Barcelona desde su Sant Pere de Ribes natal. Una odisea diaria de kilómetros para llegar al primer equipo y convertirse en una de las jugadoras más aclamadas del mundo. “Salía corriendo para no perder el tren hacia casa…incluso me planteé si valía la pena tanto esfuerzo”, confiesa.
“A la futbolista todo el mundo ya la conoce, ahora quería mostrar quién soy yo como persona. Es un relato personal para conocer quién soy y sobre todo de dónde vengo”, señala Aitana sobre por qué decidió relatar su vida con tan solo 24 años. El libro consta de 14 capítulos, un guiño al dorsal 14 que llevó Johan Cruyff y que luce ella misma ahora en el Barça. Y está prologado por Xavi Hernández, su gran ídolo de la infancia y ahora amigo.
Entre sus anécdotas más curiosas, está la de llevar el apellido materno primero en lugar del paterno: “Fue decisión de mis padres. Ambos han sido siempre muy reivindicativos en temas de igualdad y por eso yo lo llevo muy dentro desde que nací. En su momento, tuvieron que luchar mucho para lograrlo… esos pequeños detalles abren camino hacia la igualdad”.
Aitana se declara muy perfeccionista, una ‘virtud’ que le ha llevado a sufrir la presión del deporte de elite hasta el punto de que pidió la ayuda de un psicólogo para salir adelante. “Ella lo ganaba todo pero no era feliz, se la veía triste. Hacía un partido perfecto, pero se preocupaba por aquel pase en el minuto 60 que había fallado…”, relata su agente y escritor Cristian Martín. “Tenía que entender que no siempre se puede estar al 100%”, le secunda la jugadora.
Un centenar de seguidores aguardaban, una hora antes, la llegada de Aitana para la presentación de su libro. Tras el acto, se hizo una larga cola para las firmas de los ejemplares del libro, que el 5 de mayo saldrá a la luz en castellano. Un imprescindible para este Sant Jordi.