Aitana Bonmatí fue una de las protagonistas del partido entre el FC Barcelona y el Real Betis. La catalana saltó al césped con el brazalete de capitana en su brazo izquierdo y tras el encuentro confesó que “es un orgullo, es un sueño más, llevo muchos años en esta casa y siento muchísimo los colores, es un sueño cumplido y lo he disfrutado”.
Sobre la apuesta del club en potenciar la cantera femenina y la llegada de Giulia Dragoni como nueva residente de La Masia con 16 años, Aitana señaló que “el fútbol femenino está creciendo. Cuando era pequeña y tenía la edad de las jugadoras que hoy son residentes en La Masia no pasaba esto, ni siquiera entrenábamos en La Masia, entrenábamos a las 20.45. Al final todo ha cambiado y nosotras estamos disfrutando de este cambio y las pequeñas todavía lo disfrutarán más porque podrán aprovecharse más de este cambio social. Es muy positivo”.
El público la ovacionó de principio a fin, fue la más aclamada por la grada, y tras el partido firmó una infinidad de autógrafos, muchos de ellos en su libro. “Es impresionante, hace unos años no pasaba, estamos viviendo este cambio social y es muy bonito. El otro día en la Botiga fue algo parecido ver tanta gente en las Rambles. Esto es lo que queda, más que la trayectoria futbolista en partidos y victorias, lo que celebraremos en unos años lo que hemos conseguido a nivel social y estoy orgullosa de haber participado de este cambo”, destacó la jugadora azulgrana.
Por último, sobre el récord de victorias consecutivas en Liga, ya con 53, dijo que “estamos tan centradas en nuestro trabajo que a veces ni nos damos cuenta de lo que conseguimos, cuando pasen los años y veamos el récord de victorias, que espero que sean muchas más, lo disfrutaremos mucho más”.