Fernando Alonso no puede creer lo que le está ocurriendo. En la mayoría de fines de semana que tenía opciones de firmar un gran resultado, que podía sorprender con un Alpine muy competitivo, algún problema ajeno a su pilotaje, como algún contratiempo de fiabilidad en su coche, le impedía puntuar y mandaba al traste sus opciones. Le ocurrió en muchísimas carreras. Lo recopilamos hace semana en esta pieza: Un Mundial de contratiempos para Alonso. Ver para creer. A esta lista hay que añadirle lo que le ocurrió este fin de semana. En Austria la suerte volvió a golpearle.
Primero, en clasificación. Tenía coche para ser 5º o 6º, pero un piano dañó el suelo de su monoplaza y tuvo que conformarse con la 8ª plaza en la parrilla de la carrera al sprint. Y una vez ahí, seguro de que tenía coche para recuperar “algunas posiciones”, el ovetense vio como su monoplaza no se encendía.
“Nada. La verdad es que no arrancó el coche. Me quedé sin batería o algo porque estaba todo apagado. Intentamos arrancar el coche con una batería externa, pero tampoco funcionó, así que debe ser algo más. Y bueno, otra vez un problema en mi coche, y seguramente en otro fin de semana súper súper competitivo, ultra competitivo y que nos vamos a ir con cero puntos”, lamentó el asturiano, sin saber ya qué decir ante el micrófono de ‘DAZN F1’.
“Este año en general creo que es uno de mis mejores años a nivel de competitividad. Me siento muy bien, muy rápido, muy fuerte. Pero la verdad es que no hemos tenido nada de suerte y hemos perdido 50 o 60 puntos quizás en lo que va de año”. Su lugar en la clasificación (solo 28 puntos) no es justa ni con su gran rendimiento en pista, ni con la velocidad mostrada por el Alpine.
“Ha sido otro problema en mi coche, pero no sé, la fiabilidad creo que es buena, o al menos el coche de Esteban Ocon siempre va bien”, dijo en el corralito de prensa internacional, como recoge ‘Motorsport.com’.
“Este año me siento probablemente en mi mejor nivel de pilotaje, también gracias a la experiencia. Tal vez estoy al nivel de 2012 y tengo unos 20 puntos, es increíble. Quizás perdimos 70 puntos, supongo que unos 60 puntos si contamos todos los abandonos por mala suerte o por fiabilidad, por lo que está siendo una temporada muy rara”, agregó reiterando la misma idea.
“Estoy muy orgulloso de mi propio trabajo este curso, pero no conseguir puntos por todo esto es muy frustrante. Aunque estaría más triste si fuera por errores propios como hacer trompos, chocarme o cosas así. Pilotando intento hacer todo lo que puedo”, concluyó.