No está Álvaro Ramón (Ponferrada, 2000) acostumbrado a que se sucedan los mensajes de felicitación y de enhorabuena por parte de sus vecinos. Tampoco a que las cámaras de televisión recojan su euforia los días de sorteo; pero en la Copa de las sorpresas, con el Atlético y el Real Madrid batidos, el Navalcarnero sobrevive junto al Rayo Vallecano para orgullo de la Comunidad.
Él y sus compañeros son admirados en el municipio, merced a los triunfos ante el Badajoz, la UD Las Palmas y el Eibar que colocaron al Navalcarnero en los octavos de final de la Copa del Rey. “Sabemos que estamos haciendo algo histórico para el club y para el pueblo”, reconoce el joven lateral izquierdo en una entrevista concedida a la Agencia EFE.
A sus 20 años, Álvaro Ramón es consciente de que la plantilla que dirige Luis Ayllón está “haciendo algo grande”. Solo otro equipo de Segunda B, el Alcoyano, les acompaña en esta fase.
“Creo que a los equipos pequeños nos beneficia el formato. Jugar a partido único nos da más posibilidades”, reflexiona el futbolista leonés, formado en la cantera de la Ponferradina. Este curso juega en el Navalcarnero cedido por el Celta de Vigo. El club olívico se fijó en él cuando todavía era juvenil.
“Aquello me encanta”, confiesa al recordar sus últimos años en Galicia. “Estaba contento, pero a la vez necesitaba un cambio y de momento estoy muy bien aquí, deseando que sigan llegando los éxitos”, abunda.
Y es que, pese a que la próxima eliminatoria copera les vuelve a cruzar con un conjunto de Primera División, en el Navalcarnero se aferran a sus opciones de seguir progresando en el torneo.
“Este es el partido que todos queremos jugar”, subraya Álvaro Ramón en las horas previas al duelo ante el Granada.
“Estamos muy ilusionados con el partido, porque para el club es histórico. Ninguno de nosotros ha jugado un partido tan importante y, aunque sea difícil, vamos a intentar ganar. Somos un equipo de Segunda B, pero tendremos nuestras opciones y las tendremos que aprovechar”, reflexiona.
Se ve a sí mismo “haciendo un buen partido en lo personal” y también “en lo colectivo”. “El entrenador nos pide que salgamos a disfrutar y, al final, pasará lo que tenga que pasar. En nuestro campo somos fuertes y por el trabajo que venimos haciendo nos merecemos estar donde estamos”, advierte.
Asume asimismo que la presencia del Navalcarnero en los octavos de final puede guardar “algo de sorpresa”, si bien Álvaro Ramón subraya que “los futbolistas de Segunda B” no están lejos del nivel de un jugador profesional. “Se vio con el Real Madrid -eliminado por el Alcoyano- y con el Atlético de Madrid -apeado por el Cornellá-. Nosotros mismos le ganamos al Eibar”, remarca.
Entre las virtudes del Navalcarnero pondera “el trato familiar” -“esa unión nos está dando victorias”, argumenta- y la creación de un entorno favorable para que cada jugador se sienta parte del equipo. En pocos meses, pese a la lesión que sufrió a principios de temporada, él mismo se siente “cien por cien integrado y preparado” para batirse contra el Granada.
“Para mí es un sueño jugar unos octavos de final de Copa. Yo empecé jugando en un equipo de barrio y, si me pongo a pensar, de los niños que jugábamos entonces solo quedamos dos o tres. Muy pocos. Me siento privilegiado de seguir intentando llegar a ser profesional. Tengo 20 años y el futuro es incierto, esa es la verdad. Pero quiero seguir progresando y llegar lo más arriba posible”, afirma.
Por su velocidad y su desequilibrio se ve reflejado en Jordi Alba, un jugador que al igual que él retrasó su posición desde el extremo hasta el lateral.
“Al principio, ese es un cambio que cuesta porque defender siempre cuesta más. A mí me gusta atacar, es lo que mejor llevo, pero ya estoy adaptado al cien por cien a jugar ahí. En esa posición es importante defender y en eso creo que he mejorado mucho”, analiza.
Presente en los triunfos ante el Badajoz, la UD Las Palmas y el Eibar, Álvaro Ramón ansía seguir adelante en la Copa. “Sería muy bonito enfrentarnos al Barça. ¡Ya querría que nos tocara en octavos! Pero para eso habrá que pasar otra ronda. Nosotros y ellos”, sentencia.
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