Marc Márquez va a ser el gran ausente del GP de Catalunya y su mánager Emili Alzamora recibió la llamada de Marc desde la habitación de la Clinica Mayo de Rochester justo cuando estaba atendiendo a los periodistas en petit comité: “Nada, está bien, me ha explicado que ya estaba en el hospital para el preoperatorio”, ha reconocido el que fuera campeón del mundo de 125cc en 1999 durante la presentación del GP de Catalunya en la que ha participado junto a otros campeones del mundo catalanes.
Marc va a afrontar este jueves una cuarta intervención en su brazo derecho de la que el doctor Sánchez-Dalmau les ha dado garantías: “Bueno, a ver, cuando dices garantías, al final es una operación, pero como ya explico muy bien Marc el sábado, la tercera cirugía fue todo un éxito, porque tenía una bacteria de las peores, una infección muy importante. Se focalizaron en esa infección y después de tres operaciones era muy difícil dejar el húmero perfecto. Ahora el hueso está con unos grados importantes (cuantificó que son 33º de rotación) y de ahí que se haya tomado esta decisión”.
Ha querido destacar el ilerdense que “Marc lo ha intentado, ha trabajado al máximo, con un equipo médico y de fisios, ha mejorado mucho el brazo respecto al año pasado, pero su objetivo siempre ha sido luchar por los mundiales y disfrutar sobre la moto, y realmente las limitaciones eran importantes. Este año además la moto tampoco ayuda, es una realidad, Honda tiene un trabajo importante y debe mejorar la moto, y creo que es la mejor decisión que podíamos tomar”.
Presentación del GP de Catalunya de MotoGP 2022
“Sin duda dice mucho del carácter de Marc, de querer seguir luchando y seguir trabajando al cien por cien para poder volver a luchar por los mundiales, que es su gran motivación”, ha reconocido.
“Marc es humano y lo ha pasado muy mal, con recaídas y operaciones, cualquiera en su posición hubiera pensado en abandonar, pero siempre nos sorprende con su capacidad de superación y no arrojar la toalla. Personalmente, a mí nunca me ha mencionado la idea de la retirada, al contrario, siempre luchar para salir de este episodio que la vida le ha puesto por delante”.
Que en 2020 se planteara regresar cuatro días después de operarse por primera vez y que la baja prevista sea de entre 3 y 6 meses hace pensar que el objetivo, no quiere decir que pueda cumplirlo, que se plantea sería en una reaparición para Misano, especialmente porque hay un importante test post carrera en el que probarían la moto 2023. Ha recordado Alzamora, que no era de los que le empujó a reaparecer prematuramente en aquel Jerez-2, que “todos los deportistas han tenido episodios, y aquel tuvo consecuencias importantes, no lo podemos negar, es la evidencia. Pero lo importante es mirar el presente, el pasado, pasado está, y yo creo que estuvo en buenas manos con el doctor Samuel Antuña en la tercera operación, y ahora, con el doctor Joaquín Sánchez-Sotelo, está en las mejores manos. De todo se aprende y ahora, lo primero es que salga bien la operación y, segundo, los plazos que tengan que ser, serán. No hay ninguna prisa por subirse de nuevo a la moto”, ha zanjado Alzamora.