Carlo Ancelotti ha sido elegido mejor entrenador del año para la UEFA superando en la votación a los otros candidatos, Jürgen Klopp (Liverpool) y Pep Guardiola (Manchester City). El técnico del Real Madrid, ganador de la Champions y de LaLiga la temporada pasada, ha batido con holgura a sus rivales por el galardón y ha sido uno de los grandes protagonista de la gala de la UEFA en Estambul, donde se celebra el sorteo de la fase de grupos de la Champions League.
“Gracias por este premio. Gracias a Arrigo Sacchi, que fue un gran profesor para mí. Tengo que dar las gracias a mis jugadores, a mi club, a mi cuerpo técnico. También dar las gracias a nuestra afición por esas grandes y varias noches en el Santiago Bernabéu. Y a mi presidente, que me ha dado la oportunidad de volver al Real Madrid. A toda mi familia (a los que citó uno a uno), también, que me da espacio para hacer mi trabajo”, expresó el entrenador italiano.
“No hay una fórmula mágica para ganar. Pero tengo mucha pasión por el deporte. En el segundo lugar, la calidad de los jugadores a los que tienes que entrenar. Fue una temporada especial, porque tuvimos una muy buena plantilla, una buena mezcla entre veteranos y jugadores jóvenes. Y esa conexión fue muy positiva dentro del vestuario. Hubo mucha química de equipo, especialmente con la afición”, añadió
“Es importante llevarte bien con los jugadores, la relación con ellos es importante. Es duro decirle a uno que no juego. Soy una persona que ejerce de entrenador, como los futbolistas son personas que ejercen de futbolistas”, dijo Ancelotti.
Un perfil de otro tiempo
Alejado del perfil de técnico moderno y metódico que tanto abunda en los banquillos, Carlo Ancelotti es un rara avis en el fútbol actual y ha hecho prevalecer una visión humilde, honesta y práctica, fruto de años y miles de partidos de experiencia.
Ancelotti es el único entrenador que ha levantado cuatro veces la Champions (dos con el Milan (2003 y 2007) y otras dos con el Real Madrid (2014 y 2022). Además, con el título de Liga, el de Reggiolo se convirtió en el primer entrenador en salir campeón de las cinco Ligas más importantes de Europa. Ganó la Serie A con el Milan, la Premier con el Chelsea, la Ligue 1 con el PSG, la Bundesliga con el Bayern y LaLiga con el Real Madrid.
Un regreso triunfal a la élite
El entrenador italiano fue uno de los grandes protagonistas del panorama futbolístico el curso pasado. La marcha abrupta de Zinedine Zidane con acusaciones veladas a Florentino y la necesidad de afrontar una temporada en teoría de transición para relanzar a un equipo que acabó en blanco el curso obligaron al presidente blanco a tomar una decisión sorprendente, criticada y arriesgada: encomendarse de nuevo al artífice de la Décima, Carlo Ancelotti.
La exitosa carrera del italiano languidecía lejos de los focos y la presión de la élite en el Everton hasta que recibió la llamada de Florentino. “He vuelto a vivir gracias a Florentino y José Ángel” (Sánchez, el director general), dijo en reiteradas ocasiones tras ganar Liga y Champions.
Pero antes del éxito hubo dudas, incertidumbre y críticas. Ancelotti asumió el reto de ganar por lo menos una competición y echando mano de su experiencia para manejar grandes vestuarios, logró un once reconocible que le permitió dominar LaLiga con puño de hierro (cantó el alirón en abril) y ganar una Champions épica a golpe de remontadas ante los grandes favoritos.
Por el camino supo sacar partido de los veteranos, encajar a Alaba y convertir al sospechoso Vinicius en uno de los mejores delanteros del mundo. La sabiduría y la paciencia de Ancelotti y la mezcla entre veteranos y noveles hicieron el resto para coronar una temporada inolvidable para los blancos.