Aunque Koeman incluyó a Ansu Fati en la lista de convocados para viajar a Madrid y enfrentarse este miércoles al Rayo Vallecano, el técnico ya advirtió que su presencia estaba en el alero. “El jugador tiene unas molestias en la rodilla derecha. Es baja y la evolución marcará la disponibilidad”, confirmó el comunicado médico azulgrana, siempre con indefinidos a la hora de explicar las lesiones. Las alarmas saltaron, sin embargo, porque Ansu se rompió al inicio del curso pasado la otra rodilla, lo que le llevó a estar 10 meses inactivo además de tres operaciones quirúrgicas. “No tengo ninguna molestia. Ahora me duelen más las piernas por cansancio que otra cosa”, reveló el extremo de 18 años, que en la semana anterior renovó como azulgrana hasta 2027. “No tiene que ver con lesión pasada”, deslizó el preparador holandés. Y así es, pero podría perderse algún partido más, ya que desde el cuerpo técnico y médico no quieren asumir ningún riesgo.
Ansu se lesionó durante el encuentro ante el Madrid, en una jugada en la que David Alaba se le cayó encima de la articulación. Pudo seguir sobre el césped un tiempo, pero cuando Koeman le preguntó por su estado, ya en el segundo acto, decidió cambiarle. “No es grave”, apuntan fuentes del Barcelona; “no le tienen que intervenir ni nada, por lo que se espera que regrese más o menos pronto”. Ocurre que hasta ahora Koeman, consciente de que no puede perder a un extremo que le da la profundidad y el gol, no quería arriesgar con Ansu y le trazó un plan de minutos progresivos para que fuera cogiendo color y forma. Pero Fati, que pasó una última prueba esta mañana del miércoles, deberá parar un poco, por más que sí se entrenara con el equipo en estos días.
Fati se suma a la lista de bajas del equipo azulgrana para este encuentro, conformada por Pedri, Dembélé, Frenkie de Jong, Braithwaite y Araujo.
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