Apple Watch Series 7, a prueba: más pantalla pero pocas novedades en el reloj estrella de Apple

Apple Watch Series 7
Apple Watch Series 7

Los rumores previos al lanzamiento del Apple Watch Series 7 generaron bastante expectación: apuntaban a un aparato con un cambio “significativo” de diseño que abandonaría los bordes redondeados y con nuevas funciones de salud como la medición de azúcar en sangre. Pero el último reloj inteligente de la compañía de Cupertino finalmente no ha incorporado estas novedades. El dispositivo, que es bastante similar a su antecesor y no supone una gran evolución, cuenta con una pantalla algo más grande y una carga más rápida.

Al contrario de lo que apuntaban las principales filtraciones, su diseño es bastante similar al del Apple Watch Series 6. El reloj, que resulta bastante cómodo en la muñeca, mantiene la caja rectangular con esquinas redondeadas. También permanecen en uno de sus laterales un botón físico y una corona que se puede pulsar y girar para interactuar con el dispositivo. El Apple Watch Series 7 está disponible en cinco colores —verde, azul, plateado, rojo y negro— y en cajas de dos tamaños: de 41 y 45 milímetros, frente a los 40 y 44 milímetros del Apple Watch Series 6. Aun así, las correas anteriores encajan bien con el reloj de última generación.

La principal diferencia en el diseño es que los bordes del Apple Watch Series 7 son un 40% más finos y tiene una pantalla con un 20% más de área de visualización. Este panel, al ser más grande, permite visualizar más texto al mismo tiempo y hace que sea un poco más cómodo leer y responder mensajes. Además, la pantalla en teoría es un 70% más brillante en interiores cuando se tiene el brazo en reposo. En general, el contenido en la pantalla se ve de forma nítida y con el brillo, el contraste y la saturación adecuados. Al utilizar el reloj, las huellas dactilares apenas quedan marcadas en la pantalla.

Como ya es habitual con los relojes de la compañía de Cupertino, el Apple Watch de última generación solo puede ser utilizado con un iPhone. El reloj se puede utilizar para contestar llamadas y mensajes, pagar acercando la muñeca a un datáfono, gestionar notificaciones, controlar qué se está reproduciendo en el móvil o utilizar aplicaciones como Mapas, la calculadora o la grabadora.

Apple Watch Series 7
Apple Watch Series 7

Un gimnasio en la muñeca

La aplicación de entrenamientos permite escoger entre una gran variedad de deportes. Por ejemplo, tenis de mesa, elíptica, escalada, remo, senderismo, yoga o natación. Apple asegura que el reloj es apto para nadar y que se puede sumergir hasta 50 metros. Sin embargo, no recomienda practicar buceo, esquí acuático ni actividades que conlleven impactos de agua a gran velocidad o inmersiones profundas. En las pruebas realizadas por este periódico, se ha puesto a prueba el reloj con varios deportes y, en general, el registro de los mismos funciona adecuadamente.

Además de los modos deportivos que ya estaban disponibles con generaciones anteriores, la compañía de la manzana ha incorporado algunas actividades nuevas como pilates o taichi. El reloj también estrena nuevas prestaciones para los aficionados al ciclismo. Ahora es capaz de detectar cuándo se está montando en bici y recordar al usuario que puede iniciar un entrenamiento.

El Apple Watch Series 7 permite al usuario fijarse metas para moverse más o competir con otros usuarios y ver quién hace más deporte. Además, le puede sugerir cada hora que se levante. Algunos estudios indican que pasar mucho tiempo seguido sentado aumenta el riesgo de muerte. Hay investigadores que recomiendan levantarse cada media hora para reducir el efecto negativo del sedentarismo en la salud.

Un dispositivo que no es sanitario

Desde hace años los gigantes tecnológicos buscan la forma de que sus aparatos monitoricen la salud de sus usuarios. El Apple Watch Series 7 permite, al igual que su antecesor, monitorizar el ritmo cardiaco, realizar un electrocardiograma o medir el nivel de oxígeno en sangre (el porcentaje de oxígeno que los glóbulos rojos transportan de los pulmones al resto del cuerpo).

Pero es importante tener en cuenta que este reloj no es un dispositivo sanitario. Por ejemplo, Apple reconoce que “las mediciones de la app oxígeno en sangre no están pensadas para uso médico y solo deben utilizarse para cuidar el bienestar general y la forma física”. La compañía de Cupertino también subraya que el reloj no puede detectar un infarto de miocardio, trombos o accidentes cerebrovasculares: “Si no te encuentras bien o tienes algún síntoma, habla con el médico o busca atención médica de inmediato”. Es decir, todos estos datos solo son orientativos y no deben ser utilizados con fines médicos.

Rendimiento y batería

Al igual que ocurría con el Apple Watch Series 6, el rendimiento del reloj es muy positivo en todos los supuestos. Las aplicaciones se ejecutan sin ningún tipo de lag o retardo. Entre los aspectos a mejorar del último reloj de la compañía de la manzana, está la batería. Su duración varía bastante dependiendo del uso que se haga del dispositivo. En las pruebas realizadas por este periódico, ha durado aproximadamente un día y medio, lo que obliga a cargarlo prácticamente a diario.

Entre las mejoras, destaca un nuevo sistema de carga que es un 33% más rápido que el de su antecesor, según Apple. La compañía de la manzana presume de que ocho minutos de carga son suficientes para ocho horas de seguimiento del sueño. En unos 45 minutos es posible cargar el reloj hasta el 80% y llenar la batería por completo lleva aproximadamente una hora.

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