El Atlético de Madrid lleva un verano movido en cuanto a temas que han generado controversia en el seno de la afición colchonera. Uno de ellos, quizás el primero, tuvo que ver con el novedoso diseño de la camiseta rojiblanca, que por primera vez en la historia del club no tenía rayas verticales, sino que eran onduladas.
El club colchonero y la multinacional Nike quiso rendir tributo a uno de los signos distintivos a la historia del club, su presencia en el Vicente Calderón, junto al río Manzanares. Una explicación que no terminó de convencer a muchos. Entidades como la Unión Internacional de Peñas del Atlético se mostró en contra públicamente. Un grupo de aficionados, incluso, sacó una ‘contracamiseta’, más tradicional, para que
El asunto generó tanta controversia que incluso se llegó a producir una reunión entre varios colectivos del Atlético con los responsables del club, para entre otras cosas, hablar del asunto de la camiseta. También otros, como lo del Paseo de Leyendas, a raíz de la petición de muchos de que se retirase la placa a Thibaut Courtois por aquellas declaraciones previas a la final de la Liga de Campeones.
La pregunta después de todo esta es cómo está funcionando en cuanto a ventas la nueva camiseta colchonera. La respuesta es compleja porque ni el Atlético ni Nike ofrecen datos oficiales desde hace ya varios años. Al inicio de la Era Simeone la entidad sí que ofrecía este tipo de datos, pero ya no.
Pues bien, según ‘El Confidencial Digital’, la respuesta no habría sido la deseada por Nike y el Atlético. Según dicho medio, citando fuentes del Atlético, las ventas respecto al mismo periodo del año anterior “habrían descendido un 40%”. Por supuesto, datos que no se confirman desde la propia entidad. Un dato que en cualquier caso habría que ponderarlo si se trata de las tiendas oficiales y la venta ‘on-line’ del propio club, o es algo más global. Porque está claro que ese diseño no está en la línea de los gustos más tradicionales de la afición española, la más cercana, pero sí que está enfocado a un público más global que la pueda comprar por estética.
Hace ya unos meses, cuando se conoció el diseño de la misma, Mundo Deportivo realizó una encuesta en la que participaron más de 6.300 personas en la que un 72,61% de los votantes optaron por la opción “no me gusta”, frente a un 13,12% a los que les generaba “indiferencia” y un 14,27% les encantaba.