Aron Baynes, veterano pívot australiano de 35 años, todavía confía en un posible retorno a la NBA. El jugador acaba de firmar con los Brisbane Bullets por dos temporadas después de haber probado para varias franquicias de la liga estadounidense en Las Vegas (Nevada) durante la Summer League. El nuevo contrato del jugador incluye una cláusula de libertad si recibe ofertas de la NBA.
Baynes apenas llevaba este verano seis meses jugando después de haber sufrido una durísima caída en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020 que le dejó un buen tiempo sin poder caminar. La lesión espinal, que se hizo mientras corría hacia el vestuario en julio de 2021 durante un partido contra Italia, dejó al jugador postrado en la cama de un hospital en Japón durante dos meses. Hasta enero de este año no pudo volver a coger un balón después de pasar por un duro proceso de rehabilitación.
Baynes tenía ofertas en Europa y China, pero esos acuerdo no le hubieran permitido regresar a Estados Unidos, su objetivo final después de progresar adecuadamente en su recuperación en Australia. La temporada en la NBL termina en febrero, justo cuando las franquicias acostumbran ha fichar refuerzos de cara al tramo final de temporada en Estados Unidos. En nueve temporadas en la NBA, donde ganó el anillo con los San Antonio Spurs en 2014, el pívot ha promediado 6 puntos y 4,6 rebotes en 16 minutos de juego, disputando un total de 522 partidos.