Ricky Rubio siguió con su vuelta a empezar donde todo empezó, Minneápolis. En un emotivo enfrentamiento contra la que fue su primera franquicia en la NBA, los Minnesota Timberwolves, el base de El Masnou continuó sumando minutos y estadísticas tras debutar contra los Blazers y registró 3 puntos, 2 rebotes y 2 asistencias en casi 13 minutos desde el banquillo en la derrota de los Cavaliers (110-102).
Los sentimientos ganaron volumen cuando J.B. Bickerstaff -otra demostración de cómo la NBA cuida estos detalles-, puso en pista a la vez hacia el final del primer cuarto a Ricky y Kevin Love. El público del Target Center se puso en pista para aplaudir a una pareja que jugó junta durante cuatro años en Minnesota y dejó grandes recuerdos.
Ambos fueron drafteados por unos Timberwolves que seleccionaron al de El Masnou el 5 en 2009. Además, Ricky y Kevin se hicieron íntimos amigos.
El catalán, que apenas está comenzando a coger ritmo, no estuvo tan atinado como el día de su vuelta, cuando sumó 9 tantos. Ricky registró un 1/4 en lanzamientos y un 1/3 en triples pero jugó algo más de tiempo de juego, de los 10 minutos del primer día a estos casi 13.
Anthony Edwards reinó de nuevo con 26 puntos (10/18 en lanzamientos) en unos ‘Wolves’ que perdieron a Rudy Gobert, que se retiró tras 13 minutos -6 puntos y 4 rebotes-, con dolor en la ingle derecha. Fue una noche ofuscada para Donovan Mitchell, que se quedó en 14 puntos tras un 5/16 en tiros en unos ‘Cavs’ en los que Evan Mobley y Jarrett Allen se erigieron en sus máximos anotadores con 19 tantos cada uno.
El arreón final de Minnesota en los últimos 6 minutos decidió un partido muy ajustado tras el que los Cleveland Cavaliers se quedan quintos en el Este con 27-17 y los ‘Wolves’ séptimos en el Oeste con 22-22.