Valtteri Bottas avisaba el sábado tras la clasificación: “No me gusta ser segundo. Intentaré pasar primero por la primera curva”. Pero del dicho al hecho, hay un trecho. Para cumplir con sus intenciones tenía que hacer una mejor salida que su jefe de filas Lewis Hamilton, marcar la diferencia en un momento clave, pero precisamente, es en los momentos cruciales cuando el inglés da lo mejor de sí y Valtteri muestra sus debilidades. Volvió a ocurrir en el arranque del GP de España de F1 2020, con un Bottas que realizó un horrendo arranque, perdiendo dos posiciones, con Verstappen y Stroll en la curva 1 y sufriendo para mantener la cuarta plaza ante ‘Checo’ Pérez. No obstante, Valtteri pudo recuperar la tercera plaza adelantando a Stroll en el giro 4.
Mientras el finlandés sufría, la otra cara de la moneda en Mercedes era para Hamilton, que realizó una buena salida y se marchó de forma placentera hacia la primera curva, con el liderato en sus manos. Solo le podría preocupar la presencia de un Verstappen que de probar una estrategia alternativa o de tener una mejor gestión de las gomas, podría intentarlo. No obstante, en el Circuit la degradación de los neumáticos no es tan grave como se vio en Silverstone.
Por su parte, Carlos Sainz no pudo realizar otro de sus grandes arranques, aunque tampoco perdió posiciones, algo clave para poder defender su plaza en los puntos en un trazado en el que sabe que va a sufrir en cuanto a ritmo de carrera y gestión de gomas en relación a sus oponentes. Sainz mantuvo la séptima posición, mientras que el otro McLaren, el de Norris, perdió dos puestos en los primeros metros ante Gasly y Leclerc para colocarse décimo.
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