El lateral derecho Iván Balliu, que ha firmado por el Rayo Vallecano para las dos próximas temporadas, se mostró “agradecido” al club madrileño por la oportunidad de jugar en Primera y declaró que el “primer objetivo será salvarse y después disfrutar y aprender”.
Balliu, nacido en la localidad gerundense de Caldes de Malavella hace 29 años, se formó en la cantera del Barcelona, llegando a jugar en el filial a las ordenes de Luis Enrique Martínez y Eusebio Sacristán. En 2013 se marchó al Arouca portugués y después jugó en el Metz francés hasta su regreso a España, en agosto de 2018, para fichar por el Almería.
En el conjunto andaluz disputó 67 partidos y marcó un gol los dos últimos cursos, en los que jugó, en ambos, la promoción de ascenso a Primera.
“Estoy agradecido al Rayo porque me da la oportunidad de jugar en Primera. El club ha mostrado interés desde el primer día que subieron a Primera y por eso estoy con muchas ganas. Ahora quiero agradecer el esfuerzo del club y demostrarlo en el campo”, dijo Balliu, en declaraciones difundidas por el club.
Con uno de los presupuestos más bajos de la categoría, Balliu fue realista al hablar de objetivos.
“Primero hay que lograr el objetivo de salvarse y después quiero poder disfrutar, aprender y ayudar el máximo a mis compañeros. Quiero disfrutar de la categoría, la ciudad y el club”, confesó Balliu, que se mostró esperanzado en ver pronto el estadio de Vallecas lleno.
“Si los aficionados pueden estar dentro mucho mejor. Sé que la afición del Rayo es enorme. Cuando están dentro del estadio presionan y aprietan mucho. Seguro que les vamos a sentir”, concluyó.
Balliu, internacional con Albania en dos ocasiones, llega al Rayo Vallecano libre para ocupar el puesto que, previsiblemente, dejará vacante el lateral peruano Luis Advíncula, que negocia su traspaso a Boca Juniors.
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