Joan Barreda siguió sufriendo, aguantando el dolor que le produce la fractura del dedo gordo del pie izquierdo que se hizo en la etapa 2. Sigue batallando y a un gran ritmo, como demuestra su victoria en la etapa 4 disputada este miércoles. El piloto de Torreblanca está ahora a 4’30” del líder, Sanders, metido en un grupo de 6 o 7 pilotos con opciones a todo a falta de 10 etapas. Va día a día, esperanzad en que el dolor sea menor con el paso de los días. De momento, le toca encontrar soluciones a corto plazo. Usó la bota de Quintanilla, de un número más, para poder llevar el dedo vendado, pero le quedaba mejorar su sensación con el cambio de marcha, ya que no puede impactar directamente con el dedo. Finalmente, ha optado por cambiar la posición de la palanca del cambio para poder subir de marcha de forma más cómoda.
Barreda está contento con su rendimiento y quiere ir etapa a etapa, pensando primero en la de este jueves. le tocará abrir pista y eso siempre es sinónimo de pérdida de tiempo. Buscará minimizar daños y rechaza jugar junto a Quintanilla (saldrá tras suyo) para ir ayudándose en la navegación, ya que si el chileno llega a él, prefiere que el piloto que tenga mejores sensaciones realice largas tiradas en lugar de ir alternándose mucho.
“Cuando empiezas a jugar es como MotoGP, vas perdiendo tiempo. Al final lo mejor es que uno tire y el otro vaya detrás. Cuando estás cansado a los 100km, a lo mejor, si el otro tiene buenas sensaciones puede ponerse a tirar. Hay que hacer tiradas grandes, lo máximo que puedas”, comentó a MD y al resto de prensa española presente en el vivac, destacando la necesidad que tiene de seguir tirando al máximo debido a la enorme velocidad de todos los pilotos de cabeza, especialmente el ímpetu de los más jóvenes. “Le dije a Price en el refuelling que ‘nosotros estábamos locos, pero estos lo están más'”.
LA ETAPA Y EL LÍO FINAL QUE SE CAMBIÓ DE GANADOR POR UNOS MINUTOS
“Ah, sí, ¿por lo de Nacho, no? Bueno, al final me quedo súper contento de poder salir y ver que podía apretar, aun manejando un poco el dolor. Hoy ha sido un poco así, había un par de puntos difíciles de navegación y en algún momento nos hemos desviado unos cuantos pilotos, uno para cada lado, y allí he mantenido un buen ritmo y después he atrapado a Kevin. No he podido apretar mucho porque llegábamos justos de gasolina al refuelling. Además era una etapa de dunas, donde el consumo era muy alto. Allí me he mantenido detrás de él y después del refuel le he adelantado y me he sentido mejor en la parte de arena. Allí he apretado bastante y, la verdad es que he subido el ritmo”.
EL DOLOR DEL DEDO DEL PIE IZQUIERDO
“Por la mañana si que lo noto bastante. Justo ahora, con el mecánico hemos cambiado una palanca que es más alta, porque el problema es cuando meto el pie para levantar la marcha, tengo que tirarme un poco la rodilla adelante para que entre bien. Ahora, de esta manera entrará un poco mejor. Al final buscas ya la picardía. Me he dado cuenta, con las horas, que con la puntera de la moto, con menos fuerza, me entra mejor la marcha. Y le quito un poco y la verdad es que allí voy manejando. Y después es como todo. En la última parte, más rápida, haces menos cambios de marcha, y allí me sentía mucho mejor”.
OBJETIVOS
“¡Buf! faltan diez días, y el Dakar es así. Cualquier piloto, de los 12-15 que estamos allí puede marcarse… Pero es que es una locura, el ritmo que llevamos todos allí es altísimo, sin cometer errores de navegación, todo perfecto, y es así. Ese es el nivel que tiene el Dakar, que ha ido evolucionando estos últimos años. El objetivo es estar ahí, en el nivel. Después la carrera, a ver como se da. Nos gustaría que no hubiera ninguna caída grande ni pérdidas grande. Ese es el gran objetivo. Después, si las cosas vienen bien, pues perfecto, y cuando vienen algo peor, hay que sacar algo positivo y tirar para adelante”.
LOS PILOTOS AHORA VAN MUY RÁPIDO
“¿Locos? Decían de mí, pero ahora hay muchos allí que lo están. Justo en el refuelling le comentaba a Toby. Le he dicho, ‘nosotros estábamos locos, pero estos lo están más’. Es así, el rimo no para de subir. Nosotros estamos allí con todo. Cuesta, cuesta. Todo el mundo, nivelazo”.
EL GANADOR: ¿SERÁ EL QUE VAYA MÁS RÁPIDO O EL QUE COMETA MENOS ERRORES?
“Las dos. Eso de no cometer errores no sirve. Hoy en día tienes que darle gas. Vale, sí, hay 10 tíos que meten gas y caen 5 o 6, pero los 4 que quedan y ganan. Hay que tener las dos cosas”.
GESTIÓN MENTAL DE UNA LESIÓN COMO LA DE SU DEDO
“Fue duro. Por la tarde, a estas horas, era un día sin mucha cobertura, fui al camión a conectarme y estuve hablando con familiares. Me veía mal, lo veía feo. Tenía mucho dolor, el pie bombeando, hinchadísimo. Me puse una bolsa de hielo, me la anudé al pie y así dormí toda la noche. Bajo mucho el hinchazón. Cuando estaba aquí probándome la bota ni entraba, tuve que pillar una de una talla más. La verdad es que por la mañana, cuando terminé la etapa, fue una sensación… solo me importaba eso. Valoras el simple hecho de poder seguir por encima de todo lo demás, de cualquier resultado”.