Joan Barreda fue tajante al ser preguntado por la prensa española por cómo era el punto en el que se accidentaron Stéphane Peterhansel y Carlos Sainz en la etapa 6 del Dakar 2023. El piloto de Torreblanca pasó antes por allí (ya que las motos salen antes que los coches) y dijo llevarse un enorme susto al llegar a una especie de duna cortada que “debía estar marcada en el ‘roadbook’ como peligro 3”. El piloto castellonense aseguró que tras pasar por ese punto, lo comentó con otros pilotos, que esa zona generaría problemas entre los coches más rápidos por lo veloces que irían justo antes de encontrarse ese salto.
“Esa era justo después de la neutralización. Era una duna cortada…, que cuando lo hemos visto hemos parado después y hemos dicho: ‘Madre mía ahí cuando lleguen los coches’. Porque es la típica que vienes a fondo, 160 km/H, un valle, bajada, y de repente girabas el CAP (rumbo), y con la moto era poner segunda, tercera, cuarta, quinta sexta…. Y de repente ‘¡Poum!’”, expresó Joan.
“En el roadbook no estaba marcado. Me he asustado. Es cuando se te ponen los ojos ahí… ‘¡despacitooo!. Lo hemos comentado entre los pilotos. Los coches más rápidos no tenían opción. Cuando con un coche vas a la velocidad que vas y no está en el ‘roadbook’… estás así, lo ves un desierto todo planito por todos los lados… eso es una trampa”, añadió.
“Claro que debería estar marcada”, exclamó. “Y además veníamos de un cambio de dirección. Muchas veces te pueden poner un rumbo de 10 km y te dicen que hay diferentes agujeros y te buscas la vida. Pero ahí acabábamos de girar 500 metros antes, es un cambio de dirección y ahí debe estar el peligro, como está en muchos otros sitios. Eso era un peligro 3”, finalizó al respecto.
Farrés: “Era muy peligroso, Joan tiene razón”
Gerard Farrés, piloto de la categoría T3, apuntó a MD la misma idea. “Lo que dice Joan Barreda es verdad. El peligro no estaba marcado y era dificilísimo. Era muy ‘chungo’. Una duna cortada que no se veía”. Es más, el catalán aseguró que un poco antes él saltó una duna de unos 6 o 7 metros que tampoco estaba marcada, algo por lo que terminó “con el cuello destrozado”.
“Medio kilómetro antes había otro peligro igual de alto. La he pasado por la izquierda”, apuntó. Llama la atención que Nasser Al-Attiyah dijera que la duna donde se accidentó Sainz, debía haberla hecho por la izquierda. Quizás pudo referirse a esta anterior a la que hizo referencia Gerard.
“He saltado una duna de unos 6 o 7 metros y tengo suerte de que el coche ha aterrizado bien. Tengo el cuello muy tocado porque ha sido una volada de Dios. Pero por fuera pista ya se sabe que pasa esto porque en el fuera de pista ya se sabe que nunca están marcados todos los peligros. Lo que está claro es que lo de hoy era muy muy peligroso y tengo el cuello destrozado”, finalizó el piloto del equipo de fábrica de Can-Am en vehículos ligeros.