Nadie dijo que los inicios fueran fáciles. Y menos cuando te enfrentas al vigente campeón de Europa, y, probablemente, el mejor equipo del continente en la actualidad. Si a ello le unimos que el
Atlético de Madrid se presenta con bajas importantes (Diego Costa, Saúl y Giménez) y que los resultados han ido por delante de las sensaciones en este comienzo de temporada, la visita al Allianz
Arena no está en los planes más optimistas de los aficionados colchoneros.
Pero si algo ha demostrado el equipo rojiblanco es que casi siempre compite, independientemente de quién sea el rival. Que se lo digan al Liverpool, que hace unos meses cayó ante el Atlético tanto en el Metropolitano como en Anfield. Pero eso es pasado. Y era una eliminatoria.
Ahora la trascendencia es menor, porque es la primera de las seis jornadas de la fase de grupos. Y aunque caer no sería ni mucho menos definitivo, sí que ofrecer una buena imagen sería importante para el crecimiento del equipo.
Simeone tiene relativamente claro el once que pondrá en liza en Munich. Oblak, que sólo ha encajado un tanto en los ocho encuentros oficiales que ha disputado esta temporada, estará bajo palos. La defensa será para Trippier, Savic, Felipe y Hermoso, aunque Lodi tiene opciones de regresar al once tras ser baja en Balaídos. En el centro del campo, Herrera y Koke se perfilan para el doble pivote, con Llorente por la derecha y Carrasco por la izquierda. Y arriba, Joao Félix y Luis Suárez para el gol.
Teme el Atlético el poderío aéreo de los bávaros, de ahí que el Cholo pueda optar por meter a Hermoso, Hererra y Llorente en lugar de Lodi, Torreira y Correa. Gana altura.
El Bayern impone. Sólo el tropiezo ante el Hoffenheim ha evitado un inmaculado camino en los últimos meses de los de Flick, con varios títulos por medio, entre ellos la Champions y la Bundesliga. Prácticamente intratable, el cuadro alemán no es de los que se empalaga de éxito, pues nunca cambian el chip: ganar, ganar y ganar es su única meta, haciendo gala del lema de Luis Aragonés, que siempre elogió el carácter de los alemanes.
La defensa, en la que hoy estará Lucas Hernández, que llevaba media vida en el Atlético hasta que el Bayern apareció con el talonario, puede ser la línea más débil del Bayern, si bien Neuer siempre es una garantía bajo palos.
Pero a partir de ahí… Con Goretzka y el impresionante Kimmich en la sala de máquinas, Douglas Costa y Coman ponen la velocidad y el desborde por bandas. El siempre presente Müller de enganche, aportando trabajo en la presión, asistencias y goles. Lo mismo que Lewandowski en punta, si bien el polaco vive desde hace tiempo una relación idílica con la portería contraria. El Bayern tuvo a última hora de este martes un serio contratiempo, con la baja de Gnabry, que iba a ser titular, por positivo por coronavirus. Obviamente, el jugador está fuera de la convocatoria.
Noche de las grandes, con poco que perder (salvo catástrofe, que se lo sigan al Barcelona) y mucho que ganar para el Atlético.
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