Big Papi rompe el silencio tras tiroteo en RD

NUEVA YORK – Tras ser dado de alta de un hospital en Massachusetts, David Ortiz emitió su primer mensaje vía Instagram este lunes.

La leyenda de los Boston Red Sox tomó un tiempo para agradecer a todos los que estuvieron siguiendo de cerca su caso:

Ortiz, conocido como “Big Papi” fue trasladado a su hogar en Boston el viernes, según informes. Allí continuará su rehabilitación, supervisado por enfermeras y su médico personal, reportó ESPN.

El slugger de 43 años recibió un disparo en la espalda en su natal República Dominicana el pasado 9 de junio. Luego de someterse a una cirugía de emergencia en la República Dominicana, Ortiz fue trasladado a Boston para recibir atención médica en el Hospital General de Massachusetts, donde fue intervenido dos veces más.

La tercera debido a las complicaciones que se le presentaron durante el proceso de recuperación y que le mantuvo en la unidad de cuidados intensivos del centro médico.

Mientras tanto, el caso del ataque sufrido por Ortiz sigue abierto en República Dominicana, donde las autoridades ya han detenido a 14 personas, incluido el presunto autor del disparo que alcanzó al expelotero de los Medias Rojas.

Se trata, siempre de acuerdo con las autoridades, de Rolfy Ferreyra, alias ‘Sandy’, y también han detenido al presunto autor intelectual del ataque, Victor Hugo Gómez, a quien los investigadores asociaron con un cartel que introduce drogas ilegalmente en los Estados Unidos.

Por su parte, el procurador fiscal, Jean Alain Rodríguez, y el director de la policía nacional, general Ney Aldrin Bautista Almonte, establecieron en sus declaraciones oficiales que el ataque sufrido por Ortiz fue un caso de persona equivocada.

La investigación oficial reveló que el intento de asesinato, ordenado por Hugo Gómez desde Estados Unidos, estaba dirigido a su primo David Fernández y no al popular ‘Big Papi’, con quien compartía una mesa del Bar Dial de la zona oriental de Santo Domingo la noche del ataque.

El juicio a los involucrados en el ataque y que están detenidos, sin fianza, durante un año, aun no tiene fijada una fecha para su comienzo.