Solo tiene ocho años, pero Blue Ivy Carter, la mayor de los tres hijos de Beyoncé y Jay Z, puede añadir próximamente a su extenso currículum haber puesto la voz al audiolibro Hair Love, que está basado en el cortometraje animado homónimo ganador del Oscar 2020. Ha sido precisamente el director de la película, Mattew A. Cherry quien anunció la participación de la pequeña Carter en su Instagram, donde ha publicado además un fragmento en el que se puede escuchar la voz de la hija de Beyoncé en el inicio de la narración del libro.
Hair Love trata de una niña afroamericana que vive con su padre y le pide a este que le peine para una ocasión especial. El cortometraje, de apenas siete minutos, ganó un premio de la Academia a principios de este año como mejor corto de animación. Con la interpretación del audiolibro, Blue Ivy tiene la oportunidad de obtener una nominación al Grammy al mejor álbum hablado. Premio que ya han obtenido Michelle y Barack Obama por prestar su voz para la versión sonora de sus respectivas memorias. Si Blue Ivy se hiciera con el galardón en la próxima celebración de enero de 2021, todavía le quedaría mucho para ponerse al día respecto de sus padres, que entre los dos suman casi 50 premios Grammy.
En caso de éxito, no sería el primer galardón para la joven, que el pasado junio ya consiguió un premio BET por la canción Brown Skin Girl –convirtiéndose en la ganadora más joven de la historia de estos trofeos creados por la cadena Black Entertainment Televisión para reconocer la labor de las personas afroamericanas y de otras minorías étnicas– y un premio NAACP Image por el mismo sencillo.
No ha sido el único videoclip que ha protagonizado. También ha participado en el de Spirit y en el nuevo álbum visual de Beyoncé, Black is King, estrenado el pasado julio en todo el mundo en la plataforma audiovisual Disney+ cuatro años después de su último trabajo, Lemonade. La prometedora estrella parece querer seguir los pasos de sus famosos progenitores y va por buen camino. No se descarta que pruebe suerte en el mundo de la música, pues también ha hecho sus pinitos como cantante colaborando como extra en algunos temas de su madre y también cantando breves rap junto a su padre.
La mayor de los tres hijos de Beyoncé y Jay Z se mueve con soltura en la vida de lujo y caprichos que acompaña al que es el matrimonio más rico de la industria de la música y goza de una gran popularidad debido a que sus padres, de manera cada vez más habitual, la llevan de su mano a actos públicos y alfombras rojas. Pese a su corta edad, Blue Ivy tiene un estilista personal que le elige prendas de marcas de lujo como Gucci o Dolce&Gabbana, su propio chef y un guardaespaldas dedicado a ella las 24 horas. Tiene una línea de ropa deportiva que gestiona la cantante y su valor comercial es tal que su nombre completo está registrado para que nadie se lucre a su costa. Habla inglés, francés y swahilli y asiste al Centro de Educación Temprana en Los Ángeles, cuya matrícula ronda los 20.000 euros anuales y donde también estudiaron los hijos de Jack Nicholson, Jodie Foster y Barbra Streisand. Cuando no puede acompañar a sus padres, Blue Ivy se queda al cuidado de dos niñeras que la han acompañado a lo largo de todos estos años. Un servicio por partida doble del que también disponen sus hermanos menores, los mellizos Sir y Rumi, de tres años.
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