José Bordalás dijo adiós este lunes al Valencia y lo hizo mordiéndose la lengua. Aunque dijo que le habría gustado seguir en el club de Mestalla, obvió cualquier crítica a los dirigentes del club y a su máximo accionista Peter Lim y pasó página con elegancia. Lo hizo en una rueda de prensa convocada por él mismo en un hotel de la ciudad y con cerca de un centenar de aficionados en la puerta del mismo para mostrarle su agradecimiento y criticar la gestión de Meriton al frente del club.
“No le doy vueltas (a por qué estoy fuera). No me sorprende. En el mundo del fútbol, de la empresa, hay propietarios que toman decisiones. También me pasó un caso muy similar en el Alavés, que conseguimos un ascenso y me rescindieron. Lo acepté pero me afectó mucho porque pensaba que era una injusticia pero luego me fue francamente bien. Me habría gustado continuar para darle continuidad a lo que iniciamos. Le deseo lo mejor al Valencia y no sé si es justo o injusto, no sé si es la decisión correcta pero lo acepto y lo respeto”, resumió.
“Ha sido algo inesperado pero esto es fútbol. Los clubes tienen propietarios y el club ha decidido que no continúe y tengo que aceptarlo. Me hubiera gustado seguir, continuar con algo que iniciamos hace un año. Ha sido un año intenso, hemos vivido muchas emociones y quiero dar las gracias a los jugadores y a mi cuerpo técnico. Estoy orgulloso de haber dirigido al Valencia”, afirmó.
“No hay que entrar en detalles, los motivos los sabéis todos y es algo que tengo que aceptar. Me voy orgulloso del trabajo y de haber podido dirigir a un club de más de cien años de historia, he trabajado con máxima dedicación”, afirmó.
Bordalás despejó las numerosas preguntas sobre su despedido, tanto sobre el fondo como las formas. “No sé cuándo se decidió, no es algo que me preocupe. Le deseo al Valencia lo mejor y si puedo ayudarle estoy dispuesto a hacerlo al técnico que entra, al club y a todos. A partir de ahora soy un valencianista más y apoyaré en lo que necesite dice el club”, afirmó.
“Cuando dirigía al Valencia decía lo que pensaba y ahora no sería respetuoso hablar del futuro. La forma es la que se me comunicó es la que fue. Al final se me transmitió y como profesional lo tengo que aceptar, no voy a valorar si es la forma correcta”, apuntó.
“Estoy siendo totalmente sincero. Hay gente que esperaba otra respuesta pero tengo mucho respeto al Valencia. Estoy sincero, es lo que siento, no sé si han actuado bien o mal, eso lo tienen que decir otras personas. Ya no pertenezco al Valencia he venido para despedirme. Ahora no ayudaría en nada volver al pasado, al mes de marzo o diciembre. Como entrenador pedí unas cosas, el club no pudo dármelas”, fue lo único que deslizó.
Ni si quiera lanzó ninguna pulla al ya destituido Anil Murthy. “Mi relación ha sido muy buena, siempre cordial. Nunca ha habido conflicto. Puede haber diferencias de pensamiento, cada uno dirige como considera. Yo demandaba unas cosas, no ha podido ser y es un momento de agradecimiento”.
“No nos ha dado para Europa pero sí para estar en la final de la Copa del Rey, una opción de Carlos Soler nos pudo dar la victoria, estamos en la Supercopa, hemos mejorado las dos anteriores y hemos hecho debutar a muchos chicos de la Academia”, resumió.