La Fórmula 1 llegó a la ‘montaña lusa’ de Portimao, y como suele suceder con las atracciones, antes de que los vagones realicen sus piruetas a toda prisa, se deben realizar las primeras pruebas y verificaciones a un ritmo menor. El símil es perfecto para explicar lo sucedido en los primeros entrenamientos libres del GP de Portugal de F1 2021 de este viernes. En un trazado de constantes y pronunciadas subidas y bajadas, con puntos ciegos de frenada, en definitiva, una pista en la que es esencial empezar a cogerle confianza, los pilotos enfocaron su trabajo en este aspecto. Especialmente importante era este punto para los pilotos que este año cambiaron de equipo, como Carlos Sainz, que tras los pocos días de test que ha habido este año y tan solo con dos carreras disputadas con Ferrari, debe seguir trabajando para acoplarse a su bólido rojo y dar pasitos en busca de su mejor nivel. Lo mismo le sucede a Fernando Alonso, con una desventaja mayor al resto en esta pista, ya no solo porque debe seguir encontrando su mejor velocidad pura tras dos años y medio fuera de la F1, también por ser la primera vez que visita un trazado en el que hace unos meses la mayoría de la parrilla compitió en 2020. Así, el madrileño finalizó 9º y el asturiano lo hizo en la
14ª plaza, posiciones retrasadas de inicio que no quieren decir absolutamente nada, ya que a todo lo comentado, hay que añadirle las condiciones iniciales de la pista.
El asfalto aún estaba demasiado verde y todos los pilotos sufrieron mucho para calentar los neumáticos, lo que dejó una tabla de tiempos poco representativa. No obstante, sí se pudo entrever la confirmación de la tremenda pelea que se preve entre los Mercedes y los Red Bull de nuevo en esta pista, con Bottas liderando la sesión con un 1’19”648, escoltado por los dos Red Bull, con Verstappen segundo y Pérez en la tercera plaza.
De hecho, el neerlandés se quedó a solo 25 milésimas de Valtteri
en un giro en el que se quejaba muchísimo de fuertes vibraciones en sus nuemáticos que le reducían la visibilidad. Y pese a ello, se quedó a menos de un suspiro del finlandés, síntoma de que las cosas van a cambiar y mucho cuando empiece el fuego real.
Hamilton, inicio calmado
Mismo síntoma de ello es lo que se destila de la quinta posición de Hamilton, empezando muy calmado, a 0”319 del mejor crono de su compañero, guardándose todavía muchísimo potencial en un coche con el que quiere conquistar su segunda victoria en tres carreras.
Leclerc, cuarto
Por delante de Lewis quedó un buen Charles Leclerc con el Ferrari. El equipo rojo sufrió menos en Portimao el pasado curso y es gran candidato a liderar la zona media, incluso a acercarse un poco a los dos grandes conjuntos. Por ello, Pérez deberá rendir al máximo con el Red Bull paras evitar problemas ante los bólidos de Maranello, y de momento, el mexicano empezó plasmando una buena confianza, siendo tercero a 0”198 de Bottas.
McLaren sigue escondiéndose
Gasly, con un AlphaTauri que quiere plantar batalla a Ferrari y McLaren, fue 6º. Mientras, Russell se coló en una séptima posición irreal, otro ejemplo más de que no hay que sacar muchas conclusiones de una FP1 en la que McLaren volvió a rendir por debajo de su nivel, con Norris en octava posición y Ricciardo en la 13ª. Parece que los coches naranjas están optando por una estrategia similar a Imola, donde se escondieron en los libres para luego sorprender a todos estando arriba en clasificación.
Al margen de la 14ª posición de un Alonso que se centró en coger referencias en una pista desconocida para él y en ganar confianza en sus puntos ciegos, el otro Alpine, el de Ocon, terminó en la décima posición a 1”152.
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