La jugadora de baloncesto Brittney Griner, en sus primeras declaraciones tras regresar a Estados Unidos después de casi un año encarcelada en Rusia, dio este viernes las gracias a todos los que trabajaron por su liberación y aseguró que quiere volver a competir en la WNBA.
‘¡Se siente tan bien estar en casa! Los últimos diez meses han sido una batalla constante’, afirmó la medallista de oro olímpico en un comunicado divulgado en Instagram y agregó.
Junté fuerzas para mantener mi fe y fue el amor de muchos de vosotros lo que me hizo seguir adelante. Desde lo más profundo de mi corazón, gracias a todos por vuestra ayuda.
Detenida en febrero en un aeropuerto ruso, Griner fue condenada en agosto a nueve años de cárcel por posesión y contrabando de drogas y la semana pasada se anunció el acuerdo con las autoridades rusas para liberarla a cambio del traficante de armas Víktor But.
Griner, una de las grandes estrellas de la WNBA, dio las gracias especialmente a su esposa Cherelle Griner, a su círculo cercano, a ‘toda la familia de la WNBA’ y al equipo de abogados rusos que trabajó en su caso; además declaró.
Y, por supuesto, un agradecimiento especial al presidente Biden, a la vicepresidenta Harris, al secretario (de Estado de EE.UU.) Blinken y a toda la Administración Biden-Harris. Presidente Biden, me trajiste a casa y sé que estás comprometido con traer a casa también a Paul Whelan y a todos los estadounidenses. Usaré mi plataforma para hacer cualquier cosa que pueda para ayudarte. También animo a todos los que jugaron un rol en devolverme a casa a que continúen con sus esfuerzos para traer a todos los estadounidenses a casa.
Por último, Griner habló sobre su futuro deportivo y aseguró que su intención es regresar a las canchas.
También quiero dejar una cosa muy clara: tengo la intención de jugar al baloncesto para las Phoenix Mercury de la WNBA esta temporada y, haciendo eso, tengo muchas ganas de poder decir ‘gracias’ en persona y pronto a aquellos de vosotros que me defendisteis, escribisteis o publicasteis por mí.
El pacto no incluyó al también estadounidense Paul Whelan, condenado a 16 años por espionaje.
(Con información de EFE)
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