Y bajó el telón. Después de algo más de dos meses de actividad, el mercado de fichajes echó el cierre anoche con una última jornada frenética y con operaciones zanjadas sobre la bocina. Algunos clubs de LaLiga dejaron sus deberes por hacer y apuraron hasta el último minuto para completar sus plantillas. De hecho, más de un fichaje se anunció ya de madrugada, cuando el mercado ya había concluido, tras un día de lo más ajetreado en los despachos.
Al final no explotaron bombazos de última hora, y eso que haberlos los hubo. La supuesta negociación entre Barcelona y Atlético por Morata amenazó con ponerlo todo patas arriba, pero finalmente la operación no llegó a producirse y todo concluyó con las que ya se venían comentando. El club azulgrana ha sido de los que más actividad ha tenido a lo largo del mercado y el último día no fue excepción. Aubameyang, Dest, Abde y Braithwaite hicieron las maletas y Héctor Bellerín aterrizó en el Camp Nou sobre la bocina. Marcos Alonso, liberado a tiempo por el Chelsea para que pudiera ser inscrito, será anunciado hoy. También el Espanyol apuró hasta el pitido final, tanto que no pudo traspasar a Raúl de Tomás al Rayo. Sí firmó al culé Braithwaite, que cambia de club pero no de ciudad. Lo mismo sucedió en Girona, el que más movimientos registró en esta última jornada con cinco (Toni Villa, Manu Vallejo, Oriol Romeu, Fuidias y Gazzaniga). En Mestalla pareció detenerse el tiempo, con el Valencia acometiendo múltiples transferencias hasta casi la hora de cierre, siendo Carlos Soler y Kluivert las más destacadas.
Sadiq deja el Almería
La Real Sociedad logró incorporar a Sadiq y se apuntó la compra más cara realizada ayer, una operación que dejó 20 millones (variables a parte) en las arcas del Almería. El cuadro almeriense invirtió la mitad de ellos en su sustituto, El Bilal Touré, procedente del Reims, y por el brasileño Lázaro, del Flamengo. El Elche ató a dos defensas, Fede Fernández (Newcastle) y Nico Fernández (San Lorenzo), mientras que el Valladolid anunció a Kenedy pasada la medianoche.
No obstante, estas cifras se quedan lejos de las del fichaje más costoso de este verano en LaLiga, el de Aurélien Tchouaméni por parte del Real Madrid. El club blanco se movió rápido para firmar el francés del Mónaco, un traspaso zanjado por 80 millones de euros que se materializó una vez se conoció la decisión de Kylian Mbappé de permanecer en el PSG y dar calabazas al equipo blanco. Antonio Rüdiger, con la carta de libertad, fue el otro movimiento hecho en Chamartín en un verano con poquísima actividad.
Al final, los equipos de LaLiga han invertido un total de 505 millones de euros en fichajes, un saldo superior al de la temporada pasada (298 ‘kilos’) pero a años luz de las cifras que se mueven en la Premier, donde los clubs han gastado cuatro veces más que los españoles. Y eso que el Barça animó el mercado nacional dejándose 153 millones en las incorporaciones de Lewandowski, Koundé, Raphinha, Kessie y Christensen, además del citado Bellerín.
Dos adioses sonados
En el capítulo de salidas sorprendieron las de Casemiro y Alexander Isak, sobretodo por las cifras con que se produjeron. El brasileño puso rumbo al ManUnited por 70,6 millones, mientras que el sueco ya golea en el Newcastle a cambio de 70 ‘kilos’. También en la Premier recaló Guedes (Wolves) y Diego Carlos (Aston Villa), mientras que Soler (PSG), Racic (Braga) y Ocampos (Ajax) vivirán nuevas aventuras en otras ligas.
Repiten en LaLiga Ilaix (Valencia), Lo Celso (Villarreal) y Muriqi (Mallorca) tras su exitoso paso por el fútbol español el curso pasado.