Jordi
Calavera por fin vio la luz la pasada jornada. El lateral catalán pudo jugar sus primeros minutos en Primera División dejando atrás las lesiones que tanto le han castigado esta temporada:”Es verdad que este año lo he pasado muy mal por las lesiones, pero a base de trabajo, constancia y gracias a Dios he podido rascar unos minutitos y poder decir que he debutado en Primera División”, señaló aliviado y feliz por volver a sentirse futbolista. “Me estoy encontrando bien. Lógicamente no tengo el ritmo de mis compañeros pero estoy preparado para lo que venga”, afirma.
Los meses en el dique seco fueron un tormento para el jugador que no veía esa luz al final del túnel: “Tienes días en los que estás muy triste, de bajón, en los que se te pasa por la cabeza que igual no puedes volver a disfrutar del fútbol porque en mi caso era entrar y recaer. No encontraba la solución de lo que me pasaba”, recuerda Calavera que, en todo caso, nunca llegó a perder la esperanza: “Perder la esperanza no. Simplemente lo pasas mal porque eran unos meses en los que no podía entrenar con el grupo y que me hacían sentir que no era ni del equipo. Lo pasas mal, pero la familia y mi novia me han apoyado mucho. Ahora estoy curado la cien por cien y estoy entrenando con buenas sensaciones”, por lo que espera que en estos dos últimos partidos pueda volver a tener protagonismo: “Si el míster desea darme unos minutillos, lo agradeceré”, señala con timidez.
Luego llegará el verano que, en su caso, y pese a no haber apenas jugado, le vendrá bien: “Sí que es verdad que unos días de desconexión no van a venir mal porque lo he pasado muy mal”, indica el jugador que espera “venir la próxima temporada para demostrarle al míster que me puedo quedar”.
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