Ni que hubieran venido los Lakers. El hambre con la que el Barça aprovechó su primera oportunidad de alzarse con el título de Liga no dejó margen para el rival. Los azulgrana salieron lanzados a por su objetivo y el desarrollo de la final no fue más que la interpretación de una sinfonía perfecta con desenlace apoteósico para el equipo azulgrana, inmensamente superior a un Madrid desgastado al que le faltó incluso carácter.
Nikola
Mirotic lideró al Barça con 27 puntos y un 35 de valoración para firmar el triunfo por 92-73 y colocar el 2-0 final en la serie, dejando una sensación de superioridad innegable de los de Jasikevicius. Un brillante colofón al que pudo ser último partido de Pau
Gasol con la camiseta del Barça (11 puntos) y también posiblemente el de Bolmaro. Pasado y futuro de NBA.
Difícil encontrar una primera mitad tan sólida del Barça en todos los conceptos del juego. Al acierto mostrado en ataque se unió una intensidad constante en defensa que anuló los ataques del rival encarrilando la victoria desde el minuto 1.
El objetivo de los de Jasikevicius en su entrada en el Palau, con un ambiente que invitaba a la alegría, fue perder de vista lo antes posible al Madrid y durante esos primeros 20 minutos casi que lo consiguió. Convirtió los seis primeros tiros de campo y cuatro de los cinco titulares habían anotado en apenas tres minutos para situar el 16-5 en el marcador tras un triple de Calathes.
El inicio de la rotación no hizo sino empeorar las cosas para un Madrid que no encontró revulsivos ni forma de frenar la hemorragia. Gasol entró en modo supermán con dos canastas de mérito y una asistencia de fantasía a Kuric . Abrines, que falló los dos primeros tiros, se resarció con acciones defensivas descomunales que merecieron la felicitación de todos.
Las ventajas de 13 en el primer cuarto (26-13) alcanzaron los veinte al final del segundo, con Mirotic especialmente activo en situaciones de ataque frente a un Garuba que se iba al banco con tres faltas. El 48-30 del descanso dejaba bien claro cuál iba a ser el destino del partido.
Mirotic precisamente fue el que guió en el inicio del tercer cuarto con un par de canastas importantes que volvieron a situar el +20 (56-36). El Madrid apeló a su orgullo para reaccionar mediado este período a partir de un mate de Tyus en contraataque espectacular. El parcial de 0-9 les acercó a 13 (66-53) pero en presencia de Pau
Gasol en pista el Barça no concedió más. El de Sant Boi anotó un triple y un mate en contraataque dedicado a la grada que puso la directa hacia el triunfo (77-55).
En el último cuarto el Madrid perdió la capacidad para competir y casi lo dejó por imposible cuando las diferencias ya se elevaron a los 25 (87-52). A seis minutos del final no quedaron objetivos realistas para los blancos en un Palau que se entregó al festejo.
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