Eneko Capilla forma parte de una generación sobresaliente en la cantera de Zubieta: la del 95. Junto a Odriozola, Merquelanz, Guridi o Bautista, alcanzó el primer equipo, pero no tuvo ese punto de fortuna necesario para hacerse un hueco en el primer equipo. Traspasado al Asteras Tripolis griego en verano, una grave lesión ha vuelto a cruzarse en su camino. Con el optimismo y las ganas de regresar al césped intactas, Capilla se recupera en Donostia y disfruta de los éxitos de una Real a la que confía ver pronto levantar la Copa.
¿Cómo está su rodilla?
Muy bien. Han pasado dos meses desde la operación y parece que la rodilla responde bien, que los plazos se están cumpliendo.
¿Puede hacer la rehabilitación con normalidad en casa?
Dentro de lo posible, sí. Hablo todos los días con el fisio de la Real. Estoy haciendo la rehabilitación con él y me siento muy agradecido al club por todas las facilidades que me han dado. Me marca un trabajo semanal, le pregunto dudas, le mando vídeos, me va corrigiendo los ejercicios… Dentro de lo que se puede, estoy trabajando todo lo posible.
No es su primera lesión grave. ¿Cómo lo lleva a nivel mental?
Todos sabemos que en el deporte y en el fútbol hay lesiones. Además, tengo gente cercana que ha sufrido este tipo de lesión, por ejemplo Martín Merquelanz. Hay que asumir que vas a estar parado un tiempo largo, es difícil, jodido de llevar, pero cuanto antes te mentalices, mejor. Lo estoy llevando bastante bien.
Hasta la lesión estaba teniendo un papel protagonista en su equipo.
¿Qué le dice Merquelanz?
Ya ha tenido dos lesiones de rodilla así que en broma, para quitarle tensión al tema, me suele comentar que vaya pidiendo cita para la próxima operación. Ya en serio, me dice que esté tranquilo, que eso se supera. Ahí está su ejemplo. Tiene dos operaciones seguidas, casi dos años sin jugar, y mira cómo está ahora.
Merquelanz, Guridi, Odriozola, Bautista, usted… Aquella generación del 95 fue brillante.
Los recuerdos son muy bonitos. Sobre todo de la época juvenil, cuando jugamos la Youth League, llegamos a octavos y jugamos en Anoeta. Fue precioso. También en la Copa de Campeones llegamos a la final y perdimos a penaltis.Tengo un gran recuerdo de todos y me alegro mucho de que les vaya muy bien.
Guridi y Merquelanz se están reivindicando en Miranda. ¿Les ve con un sitio en la Real?
Veo bastantes partidos del Mirandés. Incluso con algún altibajo, porque Martin estuvo 3 o 4 partidos sin jugar y a Guridi le costó algo entrar, pero están rindiendo a un nivel enorme y se están mereciendo un puesto en la Real o, por lo menos, la oportunidad de poder tener un hueco. Y eso que está caro, porque madre mía vaya temporadón está haciendo la Real.
Estará disfrutando con el equipo.
Muchísimo, me encanta cómo juega. Imanol les ha dado un plus, está sacando de todos lo mejor y eso es clave. Ha conseguido hacer un equipazo.
Coincidió con muchos en la cantera.
Me alegro muchísimo que lo estén haciendo tan bien. Guevara está jugando como si estuviese en el Sanse de suelto, de bien. También Aihen, aunque le está tocando jugar menos, o Luca, que le está costando porque tiene a Odegaard por delante, que es increíble.
¿Cuál es el fichaje que más le está gustando?
A todos nos está fascinando Odegaard. Es un fichaje excelente, por eso lo trajo el Madrid. Y, aunque ya estaba el año pasado, quiero destacar el rendimiento de Mikel Merino. La campaña que está haciendo es absolutamente increíble.
El centro del campo está funcionando a la perfección.
El juego que se está creando por dentro, dando superioridad en todos los lados, es un acierto de Imanol. Lo hizo en el Sanse, lo ha llevado al primer equipo y efectivamente, entrenando y trabajándolo, las cosas salen. Le está dando un punto más a la Real y eso que, por desgracia, Illarramendi y Zurutuza no están pudiendo entrar por las lesiones.
¿Cómo ve la final de Copa?
Muy ilusionado. Es una pena el parón porque el equipo estaba en un muy buen momento. Pero estoy con ganas de ver esa final y que la Real levante el título
Capilla vivía su primera etapa en el extranjero en el Asteras Tripolis. “Estaba siendo una experiencia muy positiva. Aunque empecé los dos primeros partidos en el banquillo, a partir del tercero he jugado todos los minutos, en varias posiciones y siendo importante en el equipo. Me encontraba muy a gusto. Quizás en el mes previo a la lesión era cuando mejor me estaba encontrando”. Le restan dos temporadas más de contrato.
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