Carlos Sainz ( 12 de abril de 1962, Madrid) lucía el mono de carreras. Era el día de descanso, pero de día libre, más bien poco. Atendió a la prensa presente en el vivac y trabajó junto a su equipo hasta tarde para salir a la etapa 9 del Dakar 2023 con el objetivo de ganar el mayor número de etapas posibles. Entre tanto trabajo, sacó un hueco para atender a MD en una mesa ubicada fuera de la carpa. Le proponemos de inicio dar un salto en el tiempo de 30 años, cuando logró su segundo título del Mundial de Rallies con una remontada increíble en la parte final del curso, cuando pensaba que sus opciones eran casi nulas. Carlos aceptó con una sonrisa y un brillo en los ojos lejano al cansancio que sentía por la aventura dakariana.
30 años después, sigue aquí. ¿Quién se lo iba a decir?
La verdad es que sí (risa). Si en ese momento me hubieras preguntado por lo que iba a estar haciendo dentro de 30 años, seguro que el Dakar no lo hubiese puesto en la lista. Seguro que no. Por aquel entonces no tenía ningún interés. Mi primer Dakar empieza cuando lo hace Colim (McRae) un año y realmente me dice que ha disfrutado y que es una carrera que merece la pena.
¿Cómo recuerda ese segundo título?
Fue un año que no lo esperábamos, porque habíamos empezado mal, el coche no acababa de ir, y sin embargo hicimos un muy buen final de año y conseguimos ese segundo título cuando el año anterior, habiendo ganado un montón de rallies, perdimos el título en la última carrera. Fue un poco recompensa del año anterior. Fue con una remontada final, con aquel Catalunya… fue todo lo contrario que el curso anterior. Lo perdimos injustamente, y ese año lo ganamos en un arreón final que no esperábamos.
¿Cómo es revivir ahora aquellos momentos?
Me vienen imágenes de aquello de vez en cuando, me acuerdo mucho de Ove Anderson (ex director del equipo Toyota ) que no está hoy con nosotros, de todo el equipo Toyota, de pasarlo muy bien, de disfrutarlo mucho con Luís (Moya, su entonces copiloto), de vivir un momento que fue especial en nuestras vidas.
30 años después, está aquí. ¿Cómo logra prepararse con 60 años para estar al nivel óptimo para una carrera tan dura y llena de piedras y baches?
Lo afronto primero con mucha ilusión, muchas ganas y mucha pasión. Probablemente, esa es la mejor fórmula para poder prepararme bien. Estoy contento por ahora con nuestro rendimiento en el Dakar. Obviamente, no lo estoy con lo que pasó con el accidente (en la etapa 6, que le dejó fuera de la lucha), pero sinceramente creo que estamos haciendo un buen rally a nivel de velocidad, en las etapas largas me estoy encontrando bien y me estoy recuperando bien. También me está ayudando que no está haciendo mucho calor y eso se nota mucho. Nos hemos preparad bien y eso se nota.
Carlos Sainz, en el Dakar 2023
¿Cómo es un día de preparación de Carlos antes del Dakar? ¿3 horas en el gimnasio al día?
¡No! (risas). Hay que regular bien. Tengo un plan que me hace el mismo entrenador que me lleva desde que empecé en el Dakar, donde hay una parte aeróbica y una parte de musculación. Voy combinándola y aumentando la carga de entrenamiento según se va acercando el rally. Hay un método, un sistema detrás, me hago mis pruebas de esfuerzo, mido en qué rangos tengo que entrenar, comparo con años anteriores, este año la prueba de esfuerzo salió genial y mejor que la del año pasado. Y eso te da alegría.
¿La mente le dice que no quiere parar de correr porque le gusta lo que hace, o a veces le da un poco de pereza ir al gimnasio?
No, no. La disciplina de la preparación cada año cuesta más porque cumples años y te cuesta más entrenar y recuperar. Pero al final lo que manda es el crono. Si yo viniese aquí y mis compañeros de equipo estuvieran sistemáticamente delante porque son más jóvenes, no ganara especiales y no estuviese peleando por especiales… querría decir que probablemente es el momento de pensar en otra cosa. Pero yo siento que el equipo está contento con mi trabajo, el ritmo es bueno, los tiempos son buenos… y es cierto que este año tuvimos un doble accidente Stéphane (Peterhansel) y yo, pero al día siguiente fue Mattias (Ekström, el otro piloto de Audi) y este año no ha sido el año de Audi. Pero también Loeb volcó, así como Chicherit. Esque el Dakar no es fácil.
Peterhansel dijo que quería retirarse ganando. ¿Es esa su meta?
Mi meta es ganar. Luego ya pensaré qué hago.
¿Cómo se imagina fuera de las carreras?
Me imagino dedicando toda mi pasión y toda mi motivación en algo que me divierta. Seguiré siendo piloto, seguiré haciendo alguna carrera de clásicos o algún rally que me apetezca, en plan amateur y tranquilo. Y yo creo que me gustan tanto los coches que mi vida de alguna manera va a estar siempre relacionada con el mundo del motor, bien a través de Carlos hijo o a través de un equipo en un futuro. No lo sé.
Carlos Sainz, en el Dakar 2023
Usted está gran parte del año acompañando a su hijo Carlos a la F1. ¿Con qué se quedaría de ese mundo y del Dakar?
Son dos mundos opuestos. Me quedo con mi mundo, que son los rallies y los rally-raid. La F1 me encanta, me divierte seguir a mi hijo, pero soy un hombre de rallies.
Llamó la atención que tras un accidente tan fuerte, con el copiloto de Peterhansel sufriendo una fractura de vértebra y él perdiendo la consciencia y la memoria por unos instantes. La gente debe pensar que ustedes están hechos de otra pasta.
El otro día vivimos una situación que no la había vivido nunca y fue dura, pero Edouard (Boulanger, copiloto de Peterhansel) se va a recuperar y Stéphane está bien y nosotros estamos bien, que podía haber sido mucho más grave.
¿Cómo se encuentra de la mano, que ayer la tenía vendada, y del cuello?
Estoy dolorido, pero nada que no me impida seguir al ritmo que estoy yendo. Ahora el objetivo es intentar ganar todas las etapas que pueda.
¿Cómo supera alguien como usted un accidente en la etapa 6, consciente que quedaba aún más de una semana de carrera y ya estaba sin opciones? Mentalmente debe darle ganas de irse para casa en ese instante y debe doler mucho.
Duele mucho, muchísimo. Porque todo el trabajo del año lo mandas de un plumazo a la basura. Pero el Dakar es así, y en este caso no me ha pasado solo a mí, a todo el equipo. Pero bueno, lo único que queda es no bajar los brazos y seguir.
¿En esos instantes le ayuda tener toda la experiencia acumulada durante tantos años?
Seguro que me ayuda. Sé que siempre hay un día después y que hay una segunda oportunidad, aunque cuando eres veterano, lógicamente cada vez te quedan menos.
A una estrella del automovilismo como usted, no se le cayeron los anillos por pararse a ayudar a su compañero Ekström en la etapa 7, entregarle las piezas de su coche y quedarse en el desierto esperando el camión.
Yo hice lo que hubiese hecho Mattias conmigo. Estábamos fuera de carrera, sin ninguna opción, y él todavía tenía opciones. Cuando vi el estropicio, poco se pudo hacer. Pero por lo menos no perdió tanto tiempo como hubiese perdido si hubiese tenido que esperar al camión.
Carlos Sainz atiende a MD en el vivac de Riad del Dakar 2023
¿Qué tiene el Dakar que engancha tanto?
La dificultad y el reto. Sabes que es algo especial, que te pone al límite, y se ve que al ser humano le gusta jugar ahí al límite.
Al margen de disfrutarla, se sufre.
¡Hombre! ¡Y tanto que la sufro! Seguro. Al Dakar lo odias y lo amas. Creo que es tan difícil que cuando la has ganado y has saboreado la victoria en esta carrera, quieres intentarlo otra vez.
Alonso también se enganchó a esta carrera. Le gustaría volver en unos años. ¿Cree que podría ganar?
No es fácil, pero Fernando es capaz de aprender rápido, seguro.
Sus ingenieros dicen que cuando usted acaba un Dakar, al día siguiente los llama para mejorar cosas. No descansa. ¿Estamos en ese momento después del accidente de la etapa 7?
Sí, estamos en un momento de hacer test, de probar, de todo lo que a lo mejor no te atreves a hacer cuando luchas por la carrera. Ahora es el momento de hacerlo.
¿Si logra ganar en un futuro otro Dakar con Audi, puede ser su mayor logro deportivo?
Si Audi consigue ganar el Dakar con este coche, da igual quién lo gane, es un objetivo de todos, de todos los pilotos y los ingenieros. Sería fantástico, pero todavía estamos lejos.
Sería especial por las muchas horas que le ha puesto de dedicación en el desarrollo de un coche con una tecnología tan compleja.
Le hemos echado muchas horas. Sobre todo, es un tipo de trabajo al que hasta ahora no estaba tan acostumbrado. El reto es monumental y se está viendo y espero quela gente esté valorando la dificultad que tiene este coche, el proyecto y poner este vehículo en el Dakar para intentar ganar el Dakar.
¿Un sueño?
No tengo un sueño. Tengo un objetivo ahora mismo, que es volver a ganar el Dakar.
Muchas gracias, Carlos
No. Gracias a ti.