Ícono del sitio La Neta Neta

Carrasco: “Nunca he visto a nadie con tanto pánico como los jugadores de Malta”


Francisco José Carrasco (6 de marzo de 1959), más conocido como ‘Lobo’, vivió una de las mejores etapas de la selección española. Con un juego más preciosista que el de la conocida ‘Furia’, cuenta con una participación en un Mundial y un subcampeonato de Europa en 1984



¿Cómo es vestir la camiseta de la selección?

Es como tocar la cima. Jugar en el Barça es el sueño y luego, a partir de allí, haces méritos para entrar en al selección. Kubala me dejó tocarla. Cuando llegas a la selección alcanzas la élite. No todos los futbolistas lo pueden decirlo. Lo importante no es llegar y debutar, es mantenerse y saborearlo. Jugar un tiempo que deje constancia que no ha sido solamente un fogonazo.

¿En tus inicios era uno de tus objetivos?

Si. Con 16 años, cuando iba al Camp Nou, estaba en mi cabeza llegar al primer equipo. Yo siempre he visualizado las cosas antes de conseguirlas, no en forma de sueño. Para mí, lo primero era llegar al Barcelona. Lo importante es lo que hacemos en el campo, que es donde has de tener personalidad. En cuanto Chus Pereda me llamó para los juveniles de la selección, fue la primera vez que lo saboreé. Ya tenía el gustito a los 18 años y luego, a los 19, estuve en la olímpica. Después del último partido con esta, me llamó Kubala para que me fuese a Rumanía. Unas escaleras futbolísticas que viví brutales. Todo fue muy rápido. Lo bueno es que lo asimilé bastante bien porque en mi cabeza ya estaba funcionando la realidad. En nuestra época 120.000 personas que nos silbasen era lo normal.

¿Cómo fue tu llegada al grupo siendo tan joven?

Fue muy cariñoso. Yo era el nene de la selección. Cuando yo llego todo el mundo se extrañaba. Excepto Rexach, que estuvo varias veces. Sse apostaba más por la Furia que por la técnica. Yo fui un antes y un después en eso. Porque asociaban la altura a que no fueses extremo. Todos eran bajitos, rápidos. Incluso en juveniles todos tenían ese perfil. El molde lo rompí en ese momento, porque a mí me gustaba jugar más por fuera que por dentro. Me quedé enamorado del regate. Cuando de pequeño cogí una pelota de trapo me dí cuenta que no me la quitaban. Es la única cosa que hoy en día me fascina como el vuelo de un avión. Me sigue fascinando el regate. Cuando yo voy a ver al Barça voy a ver a Messi, porque se que va a regatear y alguna no está en el catálogo. Eso en la selección me trataron com mucho cariño. Todos me llamaban nene. Menos limpiar las botas… o lo hacías o te hacían bromas todos.

Usted ha estado en uno de los partidos más grandes de la historia de la selección, el 12-1 a Malta. ¿Cómo se vive desde dentro?

Fue… Yo he vivido partidos película. Como por ejemplo un 0-3 con el Espanyol en unos cuartos de la Copa de Catalunya. Y en su casa les ganamos 1-4, remontamos. Fue la primera que me sacudió por dentro. Luego la de Goteborg. El partido del 12-1… Nosotros estábamos allí y vimos 72 horas antes el Holanda-Malta (6-0). Cuando vimos el partido dijimos que les podían haber metido 10 o 11. Ya eso nos sirvió de alimento. Vimos que habían aflojado. Meter tantos es de tener una mentalidad… incluso en juveniles. Con eso que vimos, nos alimentamos. El segundo fogonazo psicológico fue ver a Poli Rincón dentro del autocar dando botes y saltando. Era imposible contenerlo. Yo que soy frío le decía que se calmara.

La tercera, para mí, fue la clave de todo. En lo táctico fue un esquema que yo he rescatado de fotos de mi hermano Miguel Moreno. De repente me sale un esquema con el campo de fútbol. Pusimos a Poli Rincón con Santillana en el área. Añadimos a Maceda, con Manu Sarabia recogiendo los rechaces. Con fábricas de centros por ambas bandas. Si no llegamos a poner a Maceda como tercer delantero centro no lo hubiéramos logrado.

En el plano psicológico, la clave fue cuando hicimos tres goles en muy pocos minutos. Ya no se oía el silbato del árbitro, eso parecía Maracaná. Todo se transformó, entramos en un sueño del que hoy en día… cuando lo veo, que creo que es la tercera vez, me quedo fascinado y orgulloso. Mi subconsciente me dice que no llegamos. Nunca he visto a nadie con tanto pánico en la cara que los jugadores de Malta. Vino la avalancha, el sueño y si hubiéramos tenido que hacer 13 los hubiéramos hecho.

¿EL MEJOR PARTIDO?

Un 0-4 con el Barça frente al Atlético en el Calderón y un Austria-España (2-3)

¿EL PEOR PARTIDO?

El último con el Barça y la Selección

¿EL MEJOR GOL?

En la final de la Copa de España de juveniles contra el Zaragoza y la jugada de Basilea.

¿UN RECUERDO IMBORRABLE?

Cuando debuté en Sarrià (0-2 contra el Español).

¿EL MEJOR JUGADOR CON EL QUE HAS JUGADO?

Diego Armanado Maradona

¿EL MEJOR JUGADOR QUE AS VISTO?

El que más tiempo me ha enamorado es Leo Messi.

¿EL MEJOR JUGADOR ESPAÑOL?

David Villa.

¿ALGUIEN QUE NO FALTARÍA NUNCA EN TU EQUIPO?

Sergio Busquets

¿UN ENTRENADOR?

Cesar Luis Menotti


¿Qué significa vivir un Mundial para un futbolista?

Es lo más grande. Digamos que las Eurocopas, que para un jugador que normalmente juega en la selección, que esta asentado, son partidos como casi la clasificación, aunque tienen importancia. En cuanto a visualización, la cima de la competitividad está en el Mundial. Ese es el punto más importante y más grande. El futbolista dice que a todos les gustará jugar un Mundial. Yo no participé mucho

Distéis guerra a Brasil en grupos y luego vapuleasteis a Dinamarca…

Merecimos ganar contra Brasil. Dinamarca jugaba muy bien pero había un factor psicológico. Habíamos sido su bestia negra. Era un enfrentamiento fetiche. La cabeza es importantísima. Los daneses no nos querían ver ni en pintura, y encima fuimos a parar al hotel donde estaban ellos y se tuvieron que ir. A nosotros no nos importaba estar con ellos, pero a ellos sí. En aquel momento Dinamarca prefería enfrentarse a Brasil que a nosotros. Ellos jugaban a un fútbol preciosista, pero teníamos la Furia de la época, que afortunadamente cambió. Ellos nos veían como el Atlético de Madrid de ahora. No se podían descuidar nada. Si hubiéramos salido con otra mentalidad… pero salimos a ganar y queríamos hacer prevalecer todo lo que habíamos recogido de la Eurocopa anterior.

Y otra tanda fatídica para España contra Bélgica en cuartos

No hubiéramos podido pasar de semifinales tal y como estaba Diego (Maradona). O lo engaño la noche anterior o no hubiésemos ganado. Cuando tu eres Messi, Pelé, Cruyff o Maradona y estás bien físicamente el talento lo puedes repetir muchas veces. Si no lo estás, llega un momento de que no eres capaz de repetirlo. Pero si lo estás, eres un amenaza constante. Los jugadores han de tener sentido de la responsabilidad.

Es más duro salir perdiendo en una tanda. La primera parte ellos la manejaron como habían diseñado. Iban ganando y en la segunda parte hicimos el empate y podríamos haber incluso ganado por insistencia. Estuvimos a mejor altura, pero los penaltis siempre que llegas ahí te duele muchísimo. Es cara o cruz. Si estás fino bien y si no te vas con una sensación diferente que cuando el de delante ha sido mejor. La frustración sube más por eso, no puedes felicitarlo igual.

Tu generación dio mucha guerra. En el Europeo del 1984 os quedasteis a las puertas

Nos faltó la suerte, o llámalo como sea, determinación. El partido de la final, el gol de Arconada, que se salió contra Dinamarca y Portugal… Estaba Francia acojonada por nuestras segundas partes. Físicamente estábamos muy bien, pero contra Rumanía nos cayeron críticas que nos sirvieron para encabronarnos contra la prensa. Nos juntamos y nos conjuramos. Estábamos como locos por llegar a la segunda parte. Pero no se dio. Saqué un córner y al rematar Santillana creo que dio el larguero, pero fue la única en la que pudimos dar la vuelta.

Imagino que no olvida la final. España tuvo todo en contra

Cuantas más veces llegaba al área más oportunidades tenía que me hicieran penalti. A mi el tema de los árbitros… cuando se enfrenta a un jugador del Barça o Madrid, tenemos la ventaja de poder hacer más cosas. Interactuar más. Para el árbitro en su subconsciente no es lo mismo hablar con alguien que el mismo nombra que de alguien que no conoce. Yo nunca me aproveché de ello, siempre los respete. Creo que todo el mundo tiene que respetar a alguien que va a ser juez, que siempre se va a equivocar. En aquella época hubo fallos de historial pero nunca he llegado al nivel de Lineker. Raramente me enseñaban tarjetas. Ellos tuvieron ese puto de suerte que se necesita en las finales. No lo decantó el árbitro. Si llega a ser como en Corea…Eso sí que no se puede permitir.

Abrió usted el torneo nada menos que con un gol. ¿Sabe diferente marcar en una Eurocopa?

No. Es que me gusta el gol, pero me flipan los regates. Yo no era un rematador. Si hubiese amado más el gol que el regate… Es como ligar. Yo prefiero enamorar, lo preparación. Me gusta el camino, lo que puedes llegar a hacer. Por eso el regate me tiene tan enamorado, por eso Messi me encanta.

Tras esa generación, a España le costó recomponerse. ¿Qué cree que faltó para darle continuidad?

Empezó poco a poco un cambio muy pausado de la furia por la técnica. Había un puente que se hubiese recorrido con mucha más velocidad si los bajitos famosos hubiesen aparecido antes. La transformación viene dada porque todo el mundo aquí opinaba que ganar, ganar y ganar. El método era, para lo que vi, cuanto mejor juegues más veces vas a ganar. Eso poco a poco se fue logrando. Nosotros innovamos jugando con extremos.


Source link
Salir de la versión móvil