WASHINGTON DC – Los estadounidenses que ya hayan completado el proceso de vacunación contra el COVID-19 pueden viajar libremente por el país, siempre y cuando utilicen mascarillas y sigan los protocolos adecuados en medios de transporte, dijeron este viernes los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés).
Aquellos que hayan recibido las dos dosis de las vacuna de Pfizer o de Moderna, o la dosis única de la vacuna de Johnson & Johnson, no deberán mostrar una prueba negativa del COVID-19 cuando viajen en avión, ni tampoco deberán aislarse en caso de haber tenido contacto cercano con alguien que dio positivo al virus, dijeron los CDC en su página web.
En cuanto a viajes internacionales, los CDC explicaron que los estadounidenses vacunados no deben mostrar una prueba negativa del COVID-19 al menos que sea un requerimiento en el país al que viajan; tampoco deben aislarse cuando regresen a EEUU.
Lo que sí deberán mostrar los estadounidenses cuando vuelven del exterior es una prueba negativa del COVID-19, detallaron los CDC.
Se considera a una persona completamente vacunada contra el COVID-19 dos semanas después de haber recibido su última dosis de la vacuna, ya que este período le da tiempo suficiente al cuerpo para generar anticuerpos.
Las nuevas guías de los CDC no mencionan si las personas deberán llevar consigo sus tarjetas de vacunación cuando viajen, aunque al momento ninguna aerolínea ha pautado este requerimiento.
La vacuna de Pfizer-BioNTech actualmente está aprobada para usar en menores de 16 años.
No está claro qué impacto tendrán las nuevas regulaciones en el flujo de los viajes en el país, ya que las personas ya están actualmente viajando sin restricciones. American Airlines reportó el lunes que sus reservas de boletos subieron un 90% en comparación a las reservas de viajes registradas durante la pandemia.
El anuncio llega en pleno proceso de vacunación masiva en el país. Más del 50% de los estadounidense de 65 años o mayores ya han sido completamente vacunados, y el promedio de vacunas administradas diariamente está por encima de los 3 millones, de acuerdo a datos de los CDC.
Se espera que en cuestión de horas EEUU sobrepase las 100 millones de personas que han recibido al menos una de las dosis de las vacunas contra el COVID-19.