Cesión de Aleñà y renovación de Riqui Puig

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Aleñá, ante Lenglet, la temporada pasada cuando jugó cedido en el Betis.
Aleñá, ante Lenglet, la temporada pasada cuando jugó cedido en el Betis.CRISTINA QUICLER / AFP

El Barcelona comienza a intentar aligerar la plantilla. El primero en la lista es Carles Aleñà, de 23 años, que pasará al Getafe. El club azulgrana, en cualquier caso, no hará oficial la cesión del canterano al equipo de José Bordalás hasta que no se formalicen los contratos. Aleñà, que está campaña ha disputado cinco partidos (170 minutos), volverá a salir de Barcelona. La campaña pasada estuvo en el Betis (jugó 19 partidos). La idea del barcelonés, que no se entrenó este martes junto al equipo de Koeman, es poder estar a disposición de Bordalás el próximo fin de semana. “Hasta que no haya nada definitivo no puedo hablar, pero Carles tiene permiso del club para buscar una salida. Es un futbolista con futuro que tiene que jugar y ha decidido buscar una salida”, explicó Ronald Koeman.

En el Getafe, Aleñà se reencontrará con su amigo Cucurella, con el que coincidió en la cantera del Barcelona. Riqui Puig, por su parte, otro de los futbolistas del Barcelona al que Koeman le aconseja que se busque equipo para contar con más minutos, estiró su contrato hasta 2023. En el último vínculo pactado por Josep Maria Bartomeu en 2018, el canterano tenía una cláusula en la que su contrato se podía prolongar por dos temporadas más de manera automática. Riqui Puig ha disputado 78 minutos con el técnico holandés y, por ahora, como el pasado verano, está dispuesto a pelear por un lugar en el equipo. A quienes Koeman sí espera es a Ansu Fati y Sergi Roberto. “Es complicado poner una fecha de regreso para Ansu. Es joven y tiene que recuperarse bien. Sergi Roberto podría estar disponible a final de mes. Van por buen camino”, dijo Koeman.

Umtiti, otro de los jugadores a los que Koeman le advirtió el pasado verano que no entraba en sus planes, recibió este martes el alta médica después de superar la tercera lesión de la temporada, la decimotercera desde que fichó por el Barcelona en 2016. El francés viajará a Bilbao para el duelo ante el Athletic. El preparador azulgrana, sin embargo, continúa con la misma idea. “Cualquier entrenador mira el mes de enero pensando en cómo mejorar el equipo. Lo que he hecho es hacer un plan de bajas y también de jugadores para fichar. Si no es posible, seguiremos con los jugadores que tenemos”, subrayó el técnico del Barcelona.

El Barça, quinto en LaLiga Santander con 28 puntos, a 10 del líder Atlético, viajará hoy a San Mamés, a disputar el duelo aplazado de la jornada dos de LaLiga. “Poco a poco vamos a ir viendo el Barça que quiero”, aseguró Koeman; “hemos intentado sacar el equipo adelante y prepararlo para el campeonato. Tenemos gente importante lesionada y tengo una plantilla que no he podido cambiar mucho. Hay que tener más tiempo para imponer mis ideas”. El técnico holandés sostiene que tampoco tiene todo el tiempo que desearía para poder corregir uno de los mayores déficits del Barça en la temporada: la falta de eficacia. Acumula una media de 17 disparos por partido (siete a puerta) y 30 goles (1,8 por duelo). “No podemos entrenar mucho porque tenemos muchos partidos. Practicamos disparos y finalización de jugadas, pero todo en poco tiempo. Lo más importante es la confianza de los jugadores. Los mediocampistas tienen que llegar al área contraria y por eso estoy muy contento con el gol de De Jong y las jugadas de Pedri. Hay que aumentar la eficacia”, dijo.

Y recordó el rol de Griezmann, suplente en dos de los últimos tres partidos. “Antoine sabe su sitio y he hablado varias veces con él. Si jugamos con tres centrocampistas hay que encontrar la mejor fórmula para el delantero. A mí me gusta mucho, pero tengo que elegir. Hay muchos partidos y no se puede jugar siempre con los mismos”, dijo Koeman antes de visitar al Athletic, que estrena entrenador: Marcelino. “No sé si el Athletic cambiará de sistema porque el nuevo entrenador solo ha trabajado dos días. Es un equipo que siempre da la cara en casa y apuesta por el juego físico. Sé que hasta ahora jugaban un 4-2-3-1 y que Marcelino casi siempre lo hace con un 4-4-2. Tenemos que estar preparados para los dos sistemas”, concluyó el entrenador del Barcelona.


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