La exdiputada mexicana Lucero Sánchez, examante de Joaquín “El Chapo” Guzmán Loera, aseguró el martes que la idea de hacerse a una identificación falsa para visitar al narcotraficante en la cárcel en 2014 fue del propio Chapo, y desveló que días antes de ser apresado, en febrero de ese año, el mexicano tenía miedo a ser detenido. Y habló de las cartas de amor que recibía del acusado.
La Fiscalía presentó una carta de amor enviada por ”El Chapo” desde la prisión a Sánchez, cuando todavía era diputada, en la que explicaba su plan para la visita en la prisión mexicana del Altiplano, donde el procesado fue internado en febrero de 2014.
Sánchez indicó que mantuvo comunicación con el acusado mientras estuvo en la cárcel a través de cartas y de su entonces abogado, Manuel Ozuna.
Durante su testimonio, Sánchez leyó la primera línea de una de esas misivas, que comenzaba diciendo: “Para mi reina, que es amada”, ante la indiferente mirada de la actual esposa del Chapo, Emma Coronel, que se alisaba el pelo sentada en la sala.
La “chapodiputada”, como se conoce a Sánchez, fue detenida a finales de junio de 2017 por las autoridades migratorias estadounidenses y está siendo juzgada en EEUU, acusada de narcotráfico.
Sánchez reconoció la letra del acusado porque, según dijo, había estado presente en ocasiones en las que ”El Chapo” escribía cartas y también porque “eran las palabras de amor que me escribía siempre”.
La testigo, que el martes llevaba el uniforme azul de presidiaria y que al entrar a la sala esposada evitó mirar a su examante, recordó que dicha visita a prisión le costó el cargo de diputada por Sinaloa, después de que medios de comunicación publicaran en abril de 2015 su foto en la cárcel e hicieran pública su relación con el acusado.
En septiembre de ese año fue destituida de su cargo de legisladora, que había ocupado en 2013.
Sánchez afirmó que había negado lo ocurrido en sus declaraciones a la prensa “por miedo a los enemigos que tenía” el Chapo, a quien hoy se refería como “el señor Guzmán” y porque, además, había recibido amenazas de muerte.
Durante el interrogatorio de la Fiscalía, la testigo también habló del temor que tenía ”El Chapo” a ser arrestado, miedo que el acusado le manifestó, según el testimonio de Sánchez.
En este sentido, la “chapodiputada” contó que en una ocasión, días antes de que fuera detenido (el 22 de febrero de 2014), mientras esperaban a que un secretario los recogiera para evitar ser arrestados por la Policía, Guzmán “estaba tan desesperado que decía que había que robar un coche para huir”.
Sánchez hacía referencia a un episodio que ya se ha abordado durante el juicio ocurrido en febrero de 2014, cuando el Chapo, junto a Sánchez, lograron escapar de un cerco policial en el último momento por un túnel al que se accedía por una bañera de una residencia de Guzmán.
Sánchez identificó durante su comparecencia fotos y vídeos de varias de las residencias donde solía esconderse Guzmán Loera, una de ellas ubicadas cerca del Palacio Nacional.