Kobe Bryant, el
astro retirado de la NBA que ganó cinco campeonatos, participó en 18 Juegos de
Estrellas y se convirtió en uno de los grandes de su generación durante una
carrera de 20 años con los Lakers de Los Ángeles, murió el domingo en un
accidente de helicóptero. Tenía 41 años.
En el accidente, ocurrido en la ladera de una colina y en medio de una densa niebla matutina en el sur de California, perecieron también la hija de 13 años del exbasquetbolista y otras siete personas.
La muerte
repentina de Bryant desató una oleada de muestras de pesar por un astro cuya
fama trascendía las fronteras del basquetbol.
En Chicago la comunidad
latina y su fanaticada aseguran que siguen sin poder creer la noticia de su
fallecimiento.
“Su muerte es una sorpresa para todo el mundo, más para todos aquí y en Los Ángeles porque él era una persona simple y honesta, mis condolencias para su familia, sus niñas y su esposa que dejó atrás”, dijo Pedro Lucas.
La alcaldesa de Chicago, Lori Lightfoot también se sumo a las condolencias y dijo en su cuenta de Twitter: “Triste por la muerte de @Kobe Bryant, una de las mejores leyendas de la NBA que inspiró a los fanáticos con su impulso y pasión.”
El United Center, la casa de los Chicago Bulls, se iluminó de púrpura y amarillo en su honor este domingo y el estadio comunicó que durante el partido del lunes frente a los Spurs de San Antonio, se observará un momento de silencio para recordarle.
Del mortal accidente, autoridades dijeron que el helicóptero se vino abajo alrededor de las 10 a.m. del domingo a unas 30 millas al noroeste del centro de Los Ángeles.
Las autoridades
dijeron que había nueve personas a bordo de la aeronave. Se cree que todas
murieron.
Entre los
fallecidos se encontraba Bryant, considerado uno de los mejores basquetbolistas
de la historia y quien pasó toda su carrera con los Lakers, dijo a The
Associated Press una persona enterada de la situación.
Gianna, hija de
Bryant, pereció también, dijo otra persona enterada del caso.
En Los Ángeles, miles de personas se congregaron para llorar a Bryant frente al Staples Center, muchos asistentes llevaban jerseys con el número 24 del astro.
Algunos dolientes
llevaban flores. Corearon el nombre del basquetbolista y las siglas del Jugador
Más Valioso, bajo pantallas gigantes que mostraban a un Bryant sonriente.
“Aquí es donde
necesitamos estar”, dijo Naveen Cheerath, de 31 años.
Bryant se retiró
en el 2016 como el tercer mayor anotador de la historia de la NBA, cerrando su
carrera como un canastero prolífico, con un excelente juego general e
incansable competitividad. Tuvo ese puesto en la lista histórica de anotadores
hasta el sábado, cuando LeBron James le superó y se colocó tercero durante un
partido en Filadelfia.