Alguna cosa ha cambiado desde que Christophe Galtier llegó a Camp des Loges. Gente cercana al vestuario asegura a Mundo Deportivo que el entrenador francés ha entrado con buen pie, consciente de la importancia de ganarse a los futbolistas del PSG desde la palabra pero sobre todo desde el ejemplo: “Prepara cada entrenamiento al detalle, y eso se valora”, insisten. El gran arranque de temporada también responde a esa disciplina bien aplicada.
Christophe Galtier fue de cara en su primera conversación con el grupo. Sin trabajo, el talento no sirve de mucho: “Hay que saber encontrar placer en el sacrificio”, dijo en su presentación, exactamente lo que buscaba Al Khelaifi con esta etapa que empieza. Un cambio que ya se ha podido ver en las tres primeras jornadas de liga, con un PSG que además de golear se compromete a correr y a esforzarse cuando tiene que defender.
Este domingo recibe al Mónaco en busca de su cuarto triunfo consecutivo. El entrenamiento de esta mañana estuvo presidido por el buen ambiente y las bromas que se gastan entre unos y otros, algunas hasta propiciadas por el mismo Christophe Galtier. El staff preparó un ejercicio por parejas en el que mezcló el tradicional juego ‘piedra, papel y tijera’ para determinar quién remataba cada jugada, origen de muchas de las risas que se escucharon en Camp des Loges.
Enterrado el problema entre Neymar y Mbappé, el PSG ha vivido una semana tranquila y sin fricciones. En este sentido, su entrenador ya avisó que para ganar también se necesita un equilibrio de vestuario que poco a poco se atisba en París, con unos futbolistas satisfechos porque por fin ven que hay una idea, un método de trabajo y un plan trazado para hacer las cosas bien. Y aunque eso no garantice el éxito, al menos ayuda a acercarse a él.